El Ayuntamiento de Sevilla y la Universidad de Sevilla (US) han firmado un convenio de colaboración. Es el primero desde que José Luis Sanz ejerce como alcalde. En él se comprometen a poner en marcha iniciativas de habitabilidad, cultura, I+D+I e internacionalización. Entre los objetivos principales está el de colaborar para que Sevilla sea una ciudad climáticamente neutra en 2030.

Según informan ambas instituciones, en él contemplan la ejecución de casi una treintena de proyectos que abordarán de manera conjunta. Según precisan, será para "mejorar la calidad de vida de los sevillanos y la sostenibilidad de la ciudad".

Se trata de un convenio genérico que todavía no tiene propuestas firmes. Solo una serie de líneas en las que se comprometen a trabajar. Según precisan desde el Ayuntamiento, se establecerá una comisión de seguimiento que irá avanzando en la definición de proyectos concretos.

No obstante, uno de los puntos fundamentales del acuerdo es la colaboración de la Hispalense con el Ayuntamiento en el marco del Horizon Europa de la Comisión Europea. Es el programa marco europeo en investigación en innovación. 

Esta parte del convenio no es baladí. Dicha institución comunitaria otorgó a Sevilla en marzo de 2024 la 'Mission Label'. Reconoce el plan de la ciudad por alcanzar la neutralidad climática en 2030, lo que le facilitará el acceso a inversiones públicas y privadas para alcanzar el objetivo. 

Por tanto, el convenio con la Universidad se convierte en una de las herramientas primordiales del gran reto de la ciudad de reducir un 55 por ciento las emisiones para el 2030, algo que debe manifestarse en planes en materia de energía, edificios, gestión de residuos y transporte. Varios de ellos se desarrollarán con proyectos de la Hispalense.

El convenio recoge una serie de estrategias en materia de habitabilidad. La Universidad de Sevilla incluirá dentro del proyecto Sevilla Smart City su iniciativa de Smart University. De esta manera, ambas instituciones se alinean para diseñar una ciudad inteligente en sus infraestructuras y proyectos, entre ellos los campus universitarios.

La innovación tecnológica en materia energética es otra de las líneas que recoge el convenio, por el que ambas instituciones pondrán en marcha iniciativas medioambientales. 

Así, la Universidad se compromete a contribuir en el "desarrollo y ejecución de los planes de movilidad de la ciudad". También se contempla la construcción de residencias universitarias para la revitalización de los barrios, de tal manera que queden integradas en un espacio habitable de convivencia.

Además, el Ayuntamiento de Sevilla asume el compromiso de colaborar en la modernización de los espacios universitarios dentro del plan de reformas de la Universidad. Por ello, se estudiarán posibles exenciones, bonificaciones o compensaciones tributarias, siempre de acuerdo a las ordenanzas vigentes.

La US como eje de la cultura

Dentro del convenio, se sitúa al CICUS como uno de los ejes fundamentales del sector cultural de la ciudad. Asimismo, se desarrollará conjuntamente un plan con ayudas, convocatorias y premios. También recoge el avance de la US en el Proyecto Museístico en el Rectorado.

Del mismo modo, también pretenden colaborar en acciones conjuntas en musicales y festivales e incluso se promocionará la ópera entre los universitarios. Por su parte, los centenarios de la Generación del 27 y de la Exposición Iberoamericana de 1929 serán otros de los proyectos a desarrollar de manera coordinada.

Ambas instituciones también se comprometen a fomentar la captación del talento y reforzar la cooperación del Ayuntamiento con Ulysseus, su campus conjunto con otras cinco universidades europeas.

La activación del Centro para las Lenguas y las Culturas de la Universidad de Sevilla y la colaboración en el Parque Científico Tecnológico Cartuja son otras de las líneas a desarrollar dentro de este convenio.

Cordialidad entre instituciones

José Luis Sanz y Miguel Ángel Castro, rector de la Universidad de Sevilla se han estrechado la mano en el acto de la firma del convenio. Juntos han escenificado la cordialidad entre ambas instituciones. Antes de la llegada de los populares al poder, sus proyectos iban en direcciones contrarias.

En 2022, el ahora primer edil presentó su proyecto de convertir la Antigua Fábrica de Tabacos, sede del Rectorado, en el Museo de Bellas Artes de la ciudad. Fue rechazado públicamente por el máximo responsable de la Hispalense.

Castro defendió en septiembre del 2022, el mismo día que presentaba la restauración de la fachada del Rectorado, que el edificio "no puede ser objeto de expropiación forzosa por parte de ninguna administración pública". "Este espacio no es un zoco o un bazar donde se mercadea", sentenció.

Sanz llegó a presentar a Castro el proyecto en enero de 2023, en el que el Rectorado quedaría integrado dentro del gran museo. Durante toda la campaña de las municipales, fue uno de los proyectos estrella, pero poco a poco fue perdiendo peso en sus planes.

De hecho, el pasado julio llegó el primer encuentro entre ambos responsables y el debate sobre la Antigua Fábrica de Tabacos quedó fuera del debate.

No obstante, Sanz continúa defendiendo la necesidad de que Sevilla cuente con un gran espacio museístico, pero, sin olvidar el edificio que alberga la sede central de la US, cita a otros espacios como la Plaza de España, la Fábrica de Artillería o las Reales Atarazanas.