Casi 800 personas viven en la calle o en infraviviendas de Sevilla: "Hay gente con camisa y chaqueta en albergues"
Los colectivos de ayuda a estas personas recuerdan que no tener un hogar "mata" y el Ayuntamiento se compromete a aumentar recursos.
3 octubre, 2024 06:45En Sevilla hay 765 personas censadas que no tienen hogar. Algunas de ellas viven en la calle; otras, en centros de acogida; algunas, en sus casas pero, explicó el delegado de Asuntos Sociales del Ayuntamiento de Sevilla, Pepelu García, se trata de "infraviviendas".
Se trata de pisos "sin agua corriente, sin luz o a los que se les ha caído el techo de la cocina", detalló el edil popular durante la presentación del proyecto de dos centros de asistencia integral, uno para mujeres maltratadas y otro para mayores convalecientes.
Acabar en la calle, añadió el delegado, puede afectar "a cualquiera". García anima a olvidar los "estereotipos" sobre el perfil de personas que se pueden ver en la calle. "Por cuestiones económicas, familiares, por un divorcio, por cuestiones médicas... Nadie está a salvo de acabar así", añadió.
"Hay gente en los albergues que los ves llegar con camisa y chaqueta, como voy yo", explicó el delegado de Asuntos Sociales en su comparecencia ante los medios de comunicación para tratar la polémica sobre los dos centros de ayuda nueva que se van a levantar en el Cerro del Águila y San Jerónimo.
Para Carmen Tamayo, especialista en atención a las personas sin hogar, es clave darles una ayuda "digna". "Cualquier puede acabar en la calle", coincidió Tamayo este miércoles con Garía.
"La calle mata"
Además, según esta experta, "la calle mata". No es una expresión. "Una personas sin hogar tiene 20 o 25 años menos expectativa de vida que una persona con hogar", explicó.
Para quienes están en esa situación tan vulnerable, el Ayuntamiento tiene alojamientos temporales. Hay cuatro en la ciudad. Se trata del Centro de la Macarena, el del paseo Juan Carlos I, Centro de Noche de Alta Tolerancia Hogar Virgen de los Reyes y Centro de Miguel de Mañara.
A esos recursos para personas en la calle que tiene el Ayuntamiento se suman los comedores y los centros donde pueden acudir a asearse. En este caso los hay privados, que gestionan entidades, organizaciones y hermandades y también los hay públicos.
Entre los primeros están el comedor de Santa Isabel, el de Nuestra Señora del Rosario, la Misión Urbana, donde también se dan comidas. Y el comedor del Pumarejo.
Mediación de conflictos
Además, el Ayuntamiento dispone de atención inmediata a quienes están en la calle con servicios de mediación de conflictos y campañas para cuando el frío o el calor hacen aún más complicada la vida de quienes no tienen hogar. Y, por último, centros de día y centros cívicos.
A estos recursos vienen a sumarse ahora dos centros de atención integral con solo 25 plazas que están ya en funcionamiento en Sevilla. Nadie lo sabía hasta ahora y, de hecho, señalan desde el Ayuntamiento, no han generado ningún problema en los barrios en los que se ubican, que no han desvelado por seguridad.
Ahora se harán dos más: uno para mujeres maltratadas y otro para mayores convalecientes. Son espacios donde no se entra y se sale sino que se sigue un programa de ayuda a puerta cerrada.
Esta es una iniciativa, destacó este miércoles el delegado de Asuntos Sociales, que premió la Unión Europea y la Junta de Andalucía. Y, además, que refrendaron todos los partidos presentes en el Pleno de febrero de 2021 del Ayuntamiento de Sevilla.
La Macarena
Por eso, indicó García, no se entiende desde el Gobierno municipal el revuelo por la construcción de estos dos nuevos centros.
Además, en el mismo Pleno, los partidos acordaron "desconcentrar los recursos para personas sin hogar de la Macarena". Esto es lo que se está haciendo con los nuevos centros en otros puntos de Sevilla.
Además, se aprobó la creación de una "nueva oficina para orientación e inserción laboral" de las personas sin hogar en Sevilla. También una oficina "del Centro de orientación e inserción social (COIS)".
Además, el Pleno se comprometió a promover las asambleas de personas sin hogar. Es decir, escuchar a quienes están en la calle sobre qué necesitan. Y, también, entre otras medidas, "aumentar la Unidad Municipal de Emergencias Sociales y Exclusión Social (UMIES)" para que haya tres turnos o "realizar un diagnóstico sobre las partidas presupuestarias destinadas a Personas sin hogar".
Para el delegado del ramo, esto no son palabras al viento. Este mismo miércoles recordó el compromiso de todos los grupos políticos con esta lista de propuestas y afirmó que su intención es ponerlas en marcha para mejorar la asistencia a las personas sin hogar de la ciudad.