La nueva realidad de Sevilla y Betis: así les afecta una ruptura de relaciones que recuerda a épocas pasadas
- En Heliópolis no cambiarán su forma de actuar. Los de Nervión no descartan denunciar a jugadores del eterno rival si observan algún comportamiento ofensivo.
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La ruptura de relaciones entre Betis y Sevilla ha recuperado épocas de los 90 y la primera década de los 2.000. En aquellos tiempos los enfrentamientos entre Manuel Ruiz Lopera y Luis Cuervas, primero, y José María del Nido Benavente, después, eran la normalidad.
La muerte de Puerta en 2007 devolvió la cordialidad entre las dos instituciones. Solo meses antes quedó para el recuerdo la mítica imagen de Del Nido junto al busto de Lopera en un derbi que acabó con botellazo a Juande Ramos.
Ambos presidentes se fundieron en un abrazo en el funeral del canterano. Salvo episodios puntuales, no se había perdido la normalidad en la relación en 17 años.
Desde el pasado miércoles, ambos clubes se enfrentan a una nueva realidad desconocida, al menos para sus aficionados más jóvenes, que no habían vivido ninguno de estos enfrentamientos.
La mecha prendió el pasado miércoles, pero el origen de la discordia está en el derbi copero del 15 de enero de 2022.
Antecedentes
Tras la agresión desde la grada con un palo a Joan Jordán, el Betis encargó un informe pericial para justificar que el impacto no inhabilitaba al jugador, hecho que motivó el aplazamiento del partido al día siguiente y a puerta cerrada.
Dicho documento acusaba a Lopetegui, entrenador sevillista, de haberle dicho a su jugador "cáete al suelo". El propio técnico vasco en la rueda de prensa posterior se mostró muy contundente. "Aquí o blanco o negro, o condeno o no condeno. La cabeza no la puso él y el partido no lo suspendió el", decía.
Tras el partido varios jugadores béticos se burlaron en el campo de la caída de Joan Jordán. En ese momento no pasó a mayores. El Sevilla no denunció a los órganos federativos, tal como recuerdan en el comunicado publicado para explicar la ruptura de relaciones.
En cambio, la entidad nervionense sí denunció el tifo de la grada de animación del Betis en el derbi de noviembre de 2022. Recordaba el episodio de Joan Jordán y también tenía como protagonista a Monchi. El asunto se elevó ante la Comisión Antiviolencia y conllevó una sanción económica, algo que ha recordado ahora el Betis.
El episodio de la bandera
Tras el derbi del pasado octubre, los canteranos Juanlu, Carmona e Isaac exhibieron una bandera con el escudo del Betis en negro y tachado. En esta ocasión, los de Heliópolis presentaron una denuncia ante el Comité de Competición. Cabía la posibilidad de sanción deportiva. Se concretó en el duelo ante el Celta. Los tres jugadores se perdieron el partido.
El Sevilla considera que este hecho "rompe un importante código y sienta un peligroso precedente, ya que busca castigos deportivos a través de hechos no deportivos".
La postura del Betis
En el Betis no lo ven así. "El club puso en conocimiento de los comités unas imágenes. No pedíamos sanción deportiva o económica. No somos responsables que unos jugadores no jueguen. Los responsables son las personas que han cometido un hecho punitivo", decía Ángel Haro en las únicas declaraciones públicas de los verdiblancos desde entonces.
En el equipo de la Avenida de la Palmera se remiten a estas palabras del presidente para explicar la postura del club. No desean hacer más declaraciones públicas y van a mantener la forma de proceder habitual, según las fuentes consultadas. Insisten en que es el Sevilla el que ha roto las relaciones.
Este mismo viernes, en el derbi de filiales, mantuvieron sus invitaciones de cortesía, sin que hubiese ninguna representación del Sevilla.
Por su parte, tampoco van a ser un impedimento para que Joaquín y Manuel Pellegrini estén en el homenaje a Jesús Navas previsto para el 30 de diciembre. Joaquín ya ha confirmado al palaciego que asistirá, tal como adelantaba ABC. La incógnitas es el técnico chileno. "El día 30 de veremos", decía este jueves en Movistar+.
El Sevilla se planteará denunciar en el futuro
El cambio fundamental de las relaciones entre ambos clubes se circunscribe al derbi. "No vamos a ir a la comida oficial en el partido de vuelta ni nos vamos a sentar en el palco del Villamarín", decía Del Nido Carrasco.
Sin embargo, desde el Sevilla entienden que es mucho más que eso y que su concepto de "buena relación" es diferente al del Betis. Según apuntan, jamás se habrían planteado denunciar al Comité de Competición "para buscar un daño deportivo" a su eterno rival. Aseguran que es un comportamiento inédito, al menos en España.
Las fuentes del club consultadas por EL ESPAÑOL consideran que "no se han cumplido los códigos" que ellos entienden como parte de una buena relación. Ahora la situación será diferente y podrían plantearse denunciar si consideran que existe un comportamiento ofensivo en las filas verdiblancas. Puntualizan que se han repetido en otras ocasiones y lo han dejado pasar.
Del mismo modo, insisten en que la decisión de romper relaciones ha sido meditada. En este momento, solo se plantearían volver a la normalidad si el Betis pidiese disculpas.
No habrá fotos conjuntas
La nueva realidad entre ambos clubes, por tanto, puede volver a afectar al desarrollo de la competición. En este momento, desde el Sevilla tampoco se plantean una foto conjunta junto al alcalde o al subdelegado del Gobierno, como se hace habitualmente en previa de derbi.
Más allá de estos momentos, no hay otros aspectos en los que pueda manifestarse la ruptura de la cordialidad. No hay proyectos conjuntos que exijan institucionalidad.
El próximo derbi será a finales de marzo. Será una nueva oportunidad para comprobar el estado de las relaciones entre unos clubes que siempre han dividido a la ciudad. También para ver si hay nuevos episodios que agranden una enemistad que recuerda a épocas pasadas.