La industria sevillana del motor busca compañeros de piso. O se los busca el alcalde, José Luis Sanz. Sumido en su gira china, ha mantenido reuniones con tres grandes del sector: Changan Automobile, China Automotive Engineering Research Institute y Landai Technology Group. La idea es que inviertan en la ciudad, bien abriendo sedes, bien considerando hacer algunas de sus investigaciones en el PCT Cartuja.
La propuesta tiene mimbres: el PCT es el primer parque en actividad económica de España, con 4.500 millones de euros de facturación, y casi 600 empresas. En cuanto a sede, la actividad de Renault avala las posibilidades del terreno. Es decir, Sevilla ha presentado una posición líder en China ante pretendientes que, como se suele decir, tienen con qué.
En concreto, un negocio conjunto que supera los 19.600 millones de euros al año gracias al liderazgo en segmento en boga, los SUV. También cuentan con una importante cartera de clientes internacionales de primer orden, como Amazon o Lenovo y hasta acuerdos empresariales -y por supuesto multimillonarios- con Huawei para desarrollar automóviles inteligentes.
"Ya han mostrado interés en conocer los beneficios y ventajas competitivas de Sevilla", señalan desde el Ayuntamiento. Estas son las claves de los inversores que Sanz quiere para Sevilla
Changan y su joint venture con Huawei
Changan es el protagonista de una de las reuniones que la comitiva sevillana en la ciudad de Chongqing, localidad con la que se ha firmado un hermanamiento. Como ha destacado el consistorio, se trata de uno de los cuatro grupos automovilísticos más grandes de China.
Cuentan 6.000 instalaciones de venta en más de 60 países y aseguran en su web que venden 8.500 vehículos diarios. También se presentan como las "estrellas" del mercado de los SUV en su país con sus modelos CS35 y CS75, lanzados a principios de la década pasada.
La actividad de la compañía, no obstante, ha acaparado titulares por Huawei. A finales del año pasado el gigante tecnológico anunció que formaría una joint venture con Changan para "promover la innovación y el liderazgo en la tecnología de automóviles inteligentes y promover la prosperidad y el desarrollo de la industria automotriz".
El plan de Huawei era escindir su unidad de tecnologías y recursos centrales de su unidad de automóviles inteligentes para formar una nueva firma, que sería en un 35% propiedad de Changan.
De acuerdo con Reuters, esa nueva empresa de software para vehículos inteligentes y componentes alcanzaría una valoración de 32.000 millones de euros.
Mientras ese acuerdo fructifica, Changan presume de sólidas cifras. En 2023 logró una facturación de 19.300 millones de euros.
Landai, proveedor de Amazon
En la lista de encuentros ha destacado también Landai Technology Group. Subraya el Ayuntamiento que su principal negocio es la fabricación de las pantallas táctiles y venta de conjuntos de transmisión de potencia. Entre sus clientes figuran Amazon, Lenovo y Hacer.
Sus ventas en 2023 ascendieron a 358 millones de euros, según la información consultada por este periódico. Landai cotiza en la bolsa de Shenzhen, considerada el Sillicon Valley chino, y su actividad se extiende a la fabricación de de piezas de transmisión y productos de fundición a presión para los mercados de automoción, maquinaria textil y maquinaria general en China.
En materia de automóvil, ofrece conjuntos de transmisión manual y automática, reductores de nueva energía y otras piezas de transmisión para automóviles, así como cajas de equilibrado/ejes. Exporta, entre otros, a Oriente Medio.
‘China Automotive Engineering Research Institute’
La última de las citas de Sanz se reservó a la investigación. El ‘China Automotive Engineering Research Institute’ es un proveedor público de servicios técnicos para la industria automotriz, que ha desarrollado más de 300 modelos de vehículos, más de 30 tipos de motores, más de 100 tipos de conjuntos de componentes y más de 70 nuevos materiales y procesos para la industria automotriz.
Es por su naturaleza que se piensa en el PCT Cartuja como lugar más idóneo para desarrollar su actividad, si acepta venirse a investigar.