Hoy se celebra el Día de la Madre. Algo que va más allá del desmadre de ofertas a la que nos tienen acostumbrados de año en año los grandes almacenes y las plataformas de internet. Hoy las rebajas lo invaden todo ¡Madre mía! No me parece mal dedicar un día a ello, aunque soy de los que piensan que cuando se tiene una madre se debe celebrar durante los doce meses del año.
Entregarse a los demás. La vida pone todo en su sitio. Como dice María Luisa Vela, "Ser madre es una experiencia única en todos los sentidos, porque a partir de entonces cambian las prioridades". La mía me trajo al mundo un día de San Juan de Dios a las seis de la tarde -en aquellos tiempos no se celebraba el 8M, lo que conlleva el riesgo de delatar mi edad-. Sevilla ahora, como entonces, en mayo vuelve a teñirse de morado gracias a las jacarandas. ¿Hay algo más femenino que parir?, ¿ser madre? "Muchas maravillas hay en el universo; pero la obra maestra de la creación es el corazón materno" (Ernest Bersot).
Las madres siempre están. Protagonista en los titulares de los medios. Esta semana conocíamos que una madre intentaba vender a su hija de 16 años para casarla por 50.000 euros, que un menor presuntamente mataba a su madre, la detención de una madre de un niño de 6 años hallado muerto, la conmovedora reacción de una madre con Alzheimer al ver graduarse a su hijo de 57 años o que nos había dejado la madre de Nacho Palau.
El ciento y la madre. La literatura y el cine también están llenas de títulos dedicados a la maternidad que destacan aspectos positivos o negativos de la relación que se genera a partir de un parto, aunque muchos de ellos no los conocen ni su madre. Ni aunque sean de terror. Miedo me da ¡Madrecita santa! “Cada hermano tiene una madre distinta, aunque ella sea la misma” (Marta Segrelles).
Pasar a segundo plano. Protección, preocupaciones... Hay muchos tipos de madres. Dicen que "madre no hay más que una", pero no es verdad. Una persona cercana comentaba "que los lazos familiares son impuestos por la sangre, pero que la verdadera familia la elegimos nosotros a lo largo de la vida con amigos que son como hermanos, o mayores que son para nosotros como padres o madres".
"Es como una madre" dicen de aquella persona que siempre tiene un consejo ante cualquier imprevisto. O aquella que te muestra el bolso lleno de medicinas por si de pronto algo nos doliera ¡Ay, madre! Por no hablar de las madrinas, que durante nuestra vida tampoco dejan de ser como madres.
Hay madres que te dan todo lo que tienen y otras que sin tener nada entregan su vida a los demás. Vida contemplativa. La Madre Teresa de Calcuta nos dejó también un día 5 (septiembre de 1997) y durante más de 45 años atendió a pobres, enfermos, huérfanos y moribundos. "Si no se vive para los demás, la vida carece de sentido". También decía aquello de que "los niños son como las estrellas. Nunca hay demasiados". A sor Tiyama me la encontré con sor Marta por la calle Laraña acompañando a la madre de esta última a hacer un recado. Tres madres juntas. Dos de ellas, Jerónimas de Santa Paula, el convento que fundara Ana de Santillán en el siglo XV en unas casas entre San Marcos, Santa Isabel y San Román en el que hoy habitan 20 madres. Entre sus muros vivió también sor María Magdalena, a quien dediqué un cuento en ‘Sevilla en tus sueños’. Sin ser madre siempre fue como una abuela.
Muchas felicidades mamá. Aquí, en la madre Patria (lo de Matria me suena a nutria) celebramos hoy el 5 de mayo. Ante una madre todos somos niños, independientemente de la edad que tengamos. Tan madre es la que concibe un hijo, como la que tiene 16. Sirvan estas líneas de hoy como homenaje a todas vosotras. Feliz día de la Madre.