Este es el entrante típico sevillano que triunfa siempre en las cenas de Navidad: muy económico y fácil de hacer

En Andalucía, las cenas de Navidad son momentos especiales para compartir en familia, y la gastronomía tradicional juega un papel protagonista. Los platos típicos varían entre provincias, pero siempre destacan por su sabor y la riqueza de ingredientes locales.

Entre los platos típicos se encuentra el jamón ibérico y embutidos (el jamón serrano, especialmente de las sierras andaluzas como Jabugo, es un clásico en las mesas navideñas), los quesos artesanales (destacan los elaborados con leche de cabra Payoya o Grazalemeña) o la sopa de picadillo (preparada con caldo de pollo, jamón, huevo duro y fideos, es una opción ligera para comenzar).

De la misma forma, también destacan las gambas y mariscos. De hecho, uno de los entrantes más destacados podrían ser las gambas al ajillo, una receta muy sencilla de hacer.

Las gambas al ajillo son un plato clásico de la cocina española, conocido por su sencillez y su intenso sabor. Originario de regiones costeras, especialmente de Andalucía y la zona central de España, este plato combina mariscos frescos con los sabores potentes del ajo y el aceite de oliva.

En cuanto a los ingredientes principales para hacer gambas al ajillo: 

• Gambas frescas: Pueden usarse peladas o enteras, según la receta.
• Ajo: Usualmente se corta en láminas finas.
• Aceite de oliva virgen extra: Base esencial del plato.
• Guindilla o pimiento rojo seco: Para aportar un toque picante.
• Perejil fresco: Se añade como decoración y para realzar el sabor.
• Vino blanco (opcional): Algunas versiones incluyen un chorrito para darle profundidad al sabor.

En cuanto a la preparación básica para elaborar las gambas al ajillo resulta bastante sencilla en tanto que apenas se han de seguir 4 pasos para tenerlas ya lista. La preparación es la siguiente:

• En una cazuela de barro o sartén, se calienta el aceite de oliva junto con las láminas de ajo y la guindilla hasta que el ajo esté dorado.
• Se añaden las gambas y se cocinan rápidamente, ya que necesitan poco tiempo para estar en su punto.
• Se finaliza con perejil fresco y, en algunas versiones, un toque de vino blanco.
• Se sirven calientes, a menudo acompañadas de pan para mojar en el aceite aromatizado

[Para cenar algo delicioso me preparo este rico plato típico de Sevilla: se hace en 5 minutos y es rico en proteínas]

En algunas regiones, se añade un poco de pimentón para dar un sabor más ahumado. También pueden enriquecerse con un toque de limón al final para añadir frescura. Las gambas al ajillo son un plato perfecto como tapa o entrante, representando la esencia de la gastronomía española: pocos ingredientes, técnicas simples y un resultado lleno de sabor.

Finalmente, cabe destacar que las gambas al ajillo tienen un perfil nutricional saludable gracias a sus ingredientes principales: gambas, aceite de oliva, ajo y guindilla. Este plato aporta proteínas, grasas saludables y compuestos bioactivos que benefician la salud.

Propiedades nutricionales de las gambas al ajillo

En primer lugar, las gambas son ricas en proteínas de alta calidad, esenciales para la reparación y el mantenimiento muscular. Y de la misma forma, tienen un bajo contenido en grasas, en tanto que contienen poca grasa, y la mayor parte es saludable, como los ácidos grasos omega-3.

De la misma forma, aportan vitamina B12, yodo, selenio y fósforo, importantes para el metabolismo energético, la salud tiroidea y el sistema inmunológico. Igualmente, las gambas al ajillo son bajas en calorías: aproximadamente 100 calorías por cada 100 gramos, dependiendo de la preparación.

Asimismo, cabe destacar que el aceite de oliva virgen extra que llevan las gambas al ajillo aportan arasas saludables, de tal forma que son ricas en ácidos grasos monoinsaturados, beneficiosos para el corazón.

En cuanto al ajo, hay que tener en cuenta que incorpora propiedades antibacterianas y antioxidantes, en tanto que contiene compuestos sulfurados como la alicina, que favorecen la salud cardiovascular y fortalecen el sistema inmunitario.

Aporte calórico aproximado (por ración de 100 g)

• Calorías: 180-200 kcal.
• Proteínas: 18-20 g.
• Grasas: 10-12 g (principalmente insaturadas).
• Hidratos de carbono: 2-3 g (muy bajo contenido).

Este plato es una opción nutritiva y equilibrada, ideal como parte de una dieta mediterránea. Sin embargo, conviene moderar el uso de sal para evitar un exceso de sodio.