Para los escrutadores políticos, las coincidencias no existen. Que se haya viralizado un enternecedor mensaje de confraternidad escrito por Toni Martín Iglesias, vicesecretario de Coordinación Política del PP de Andalucía, en su cuenta personal de Facebook no será tampoco fortuito según los tejedores de entretelas cuando Soraya Sáenz de Santamaría busca tender puentes con la Generalitat. Pero así ha sido, asegura su protagonista, que se confiesa sorprendido por el alcance de su contrición sentimental por Cataluña.
El post data del dos de enero, y en él Martín relata como han transcurrido sus vacaciones familiares de Navidad en Girona. "Me voy de Cataluña sin haberlo conseguido, lo confieso. Por más que lo he buscado no he tenido suerte.." - arranca el testimonio. ¿Y qué esperaba encontrar? Lo revela a continuación: una muestra del sentimiento antiespañolista hostil que traerse de vuelta a Sevilla y que probase los resentimientos y suspicacias enquistados entre andaluces y catalanes.
"Venía yo buscando a ese que le dices buenos días y te contesta en catalán, y le dices "perdón, es que no le entiendo" y te sigue hablando en catalán. Pero no lo he encontrado" - explica el relato. O "al que no te mira o lo hace con cara de asco cuando ve que eres de otra parte de España. Pero oye, ni rastro". Con fingida ingenuidad Martín encontraba estas actitudes inesperadas, ya que "todos tenemos un amigo a quien le ha pasado".
Al contrario, durante sus vacaciones no ha encontrado más que "gente muy amable" y "muy simpática". La experiencia, según cuenta, ha sido de una increíble calidad humana. "Hemos recibido más sonrisas y educación que en mucho tiempo. Me han preguntado por mi ciudad, por si me lo estaba pasando bien en Cataluña, le han hecho carantoñas a mis niños, me han ayudado en lo que han podido y en lo que he necesitado..."
Todo lo cual ha llevado a Martín a abrir su corazón en la red social y admitir que se marchaba sintiéndose "gilipollas" por haber asumido prejuicios, algo que le resulta especialmente doloroso por ser de Andalucía, objeto de mitos y coletillas de todo color para el resto del país. "Que a mis 50 años (...) sea yo capaz de tragarme todavía esos estereotipos, esos clichés que tan poco me han gustado siempre cuando los aludidos somos nosotros, los andaluces. Con esos tópicos malignos de unos y otros, y con la que está cayendo políticamente por aquí, tan sólo contribuimos a extender el odio y el rechazo. Y como yo, estando aquí, pienso que estoy en mi casa, debería haberme negado a prejuzgar a nadie porque sí".
La llamada a la concordia de Martín se acerca a los 15.000 compartidos en Facebook y, tras saltar a los medios, la propia televisión catalana TV3 quiso hablar en la noche del martes con él. Ante las preguntas de Mes324 admitía que su visión idílica podría haber estado tintada de rosa por haberse tratado de turismo, aunque replicaba que muchos de sus comentarios eran de personas que, habiéndose desplazado desde otra región de España para residir en Cataluña, compartían su experiencia.
El cargo del PP negaba cualquier intencionalidad política de su mensaje. "Aunque yo me dedique a la política, lo que yo he expuesto es la opinión de un padre de familia que ha viajado a Cataluña a pasar unos días. Es un comentario sentimental, dedicado a la buena tierra y a las buenas gentes de Cataluña". Según él, quería contribuir a disipar prejuicios enquistados "desde niño" que, "con la que está cayendo", solo sirven para fomentar el "odio".
Apretado por el presentador para opinar sobre la reunión entre Soraya Sáenz de Santamaría y Oriol Junqueras, y si ha faltado diálogo entre el gobierno central y autonómico, Martín ha señalado que los comentarios que recibe culpan a los políticos de la situación - y "a los medios comunicación", ha apuntado. "Todo el mundo no puede estar equivocado. Las personas que se dedican a la política deberían darle una pensada". Contaba también que "muchísimos" compañeros del PP andaluz habían contribuido a compartir su post. "Se han sentido identificados".