El español es uno de los idiomas más ricos del mundo gracias a su extenso vocabulario. Si a ello unimos los acentos, las expresiones populares y las muletillas típicas de cada una de las regiones de nuestro país, el resultado es una lengua (casi) indomable, llena de peculiaridades en función del lugar en el que nacimos. Por ejemplo, si uno habla con un murciano, es muy probable que escuche o lea algún "acho" o "pijo" durante su conversación. En cambio, si el intercambio de palabras se produce con un madrileño, seguramente éste utilice "mazo" como adverbio de cantidad y hable de "un canteo" para referirse a algo que es muy "cantoso", descarado o llamativo.
Alberto Rodríguez (@GochiActualMsic en Twitter), un joven estudiante de Periodismo, creó el pasado 19 de marzo un 'meme' que se ha convertido en toda una sensación en Twitter. Se trata de la imagen de un teclado de ordenador en la que, sobre las letras, aparecen algunas de las expresiones que más repiten los madrileños.
La idea surgió a raíz de una serie de imágenes que habían circulado por la red en los últimos días. "Estaba de moda un meme que se refería a cómo los italianos hacían las cosas, así que pensé: ¿por qué no uno de Madrid?", cuenta este madrileño vía Twitter. Alberto se refiere a esto.
El resultado de la ocurrencia son más de 8.500 retuits en menos de 10 días. "No me esperaba que fuese a gustar tanto. Considero que tengo tuits mejores y no han tenido tanta repercusión", explica el joven, que asegura que nunca se había visto obligado a desactivar las notificaciones de la aplicación del móvil debido a la incesante actividad.
Así, como suele ser habitual, el meme se ha hecho popular en la 'tuitesfera' patria y no han tardado en aflorar versiones de otras regiones de nuestros país, un hecho que no ha terminado de gustar al joven estudiante. "He visto muchas versiones que en la práctica son plagios. Yo usé una idea y la cambié para que fuera diferente. Me parece mal que la gente plagie íntegramente contenido porque la gracia está en la originalidad", comenta.
Sea como fuere, lo cierto es que la idea ha sido acogida en Twitter con tremendo entusiasmo. Será el poder de las redes sociales el que determine qué expresiones populares gozan de una mejor aceptación entre los oriundos de cada región.