La devastadora noticia de que los servicios de rescate dan por muertos a los 79 desaparecidos del incendio en la Grenfell Tower supone un duro golpe para la moral de los londinenses. La capital, inmersa en una escalada de violencia que ha tenido en el atropello de una decena de musulmanes la deplorable represalia por el ataque de Borough Market, se vuelve hacia sus fuerzas de Seguridad, sus héroes cívicos que demuestran valor más allá del deber. "Sabes que la cosa no va bien cuando te piden que escribas tu nombre en tu casco antes de entrar" - escribía un espartano bombero identificado como 'Mick' en un tuit que se ha hecho viral.
Los Bomberos de Londres, sin embargo, necesitan ayuda para llevar a cabo el laborioso proceso de recuperar los cuerpos en la torre de 24 plantas que corre riesgo de derrumbe. Para ello han empezado a usar desde este fin de semana a perros especializados en tareas de rescate. Aparte de su excelente olfato, los canes pesan considerablemente menos que un bombero con su equipo al completo y pueden acceder a los pisos superiores, en los que los daños provocados por el incendio dificultan enormemente el acceso.
Las condiciones extremas en el interior de la torre arrasada implican que los perros también necesitan protección especial, un detalle que ha encandilado a los londinenses: están equipados con pequeñas botas adaptadas a sus patas para protegerlas del calor producido por los rescoldos de materiales que todavía sigan ardiendo. Evitan además que sus delicadas almohadillas salgan heridas por aristas cortantes y vidrios rotos.
Los perros también ejercen una función clave en la investigación del incendio. Están entrenados para identificar distintas sustancias inflamables, explica el diario Metro. Así, mientras buscan restos humanos, podrían llegar a determinar cuál fue el origen del fuego y, llegado el caso, si se trató de un acto intencionado.
"Desafortunadamente, no esperamos encontrar a ningún otro superviviente y la operación pasa ahora a ser de recuperación en lugar de rescate"- explicaba el comisionado del cuerpo de Bomberos de Londres, Dan Cotton. "Nuestros equipos de búsqueda y rescate urbano (USAR) trabajan en estos momentos para asegurar el bloque, de modo a que los bomberos puedan seguir progresando en el interior del edificio mientras hacen una detallada búsqueda, a nivel de huellas dactilares, de quien pueda estar aún dentro".
"Este proceso va a ser lento y minucioso" - advertía el oficial. "Especialmente en los pisos altos, que van a suponer el mayor reto para acceder y registrar. Quiero ser realista, tendremos muchos días por delante de trabajo en el lugar del siniestro. No sabemos aún qué provocó el fuego. No sabemos dónde comenzó y no sabemos por qué se expandió como lo hizo".
La Policía Metropolitana de Londres, por su parte, ha mostrado imágenes de los pisos superiores de la torre, advirtiendo de que algunos de los cuerpos de los que ahí fallecieron posiblemente no podrán ser identificados, ya que la intensidad del incendio ha consumido por completo los restos biológicos.