El mundo del taxi está en un momento complicado. Acostumbrados a no tener competencia directa, la llegada de servicios como Uber y Cabify ha puesto patas arriba el mercado. Las protestas han sido bastante llamativas -por decirlo de alguna forma-, pero además ha obligado al gremio a movilizarse y lanzar sus propias aplicaciones. La más conocida en España es MyTaxy -que se fusionó con Hailo, su competencia-.
La compañía ha lanzado una nueva campaña publicitaria, en la que ha querido ir de rompedora y tal vez se haya pasado un poco. Apuntando a un público joven, se ha subido al carro de querer darle un aire fresco, dinámico y social creando un hashtag -algo obligatorio hoy en día-. El problema es que uno no acaba de entender muy bien qué tienen que ver las imágenes con pedir un taxi.
La campaña consta de dos imágenes. La primera es esta:
Visto desde lejos, parece más bien un anuncio de All-Bran... además el hashtag tampoco ayuda a evitar la confusión, ya sabéis, los momentos... alguien con mala leche puede decir que es una referencia al típico cliché del taxi que es poco más o menos que una letrina. Además, no hay nada peor que estar en el retrete con prisas, así que lo más normal es esperar a acabar y entonces pedir el taxi.
Pero el anuncio que realmente ha causado polémica es el segundo, con una imagen que tampoco parece muy relacionada con el mundo del taxi...
Así vista rápido tampoco parece que sea un servicio de transportes, más bien podría ser un anuncio de preservativos. O algo peor...
Obviamente, las críticas han llovido por el uso mercantilista del cuerpo de la mujer, al fin y al cabo el sexo vende -o no-. Pero la sociedad está tan hipersensibilizada con este aspecto que pasarte de la línea significa que te van a llover palos como estacas. Y eso es exactamente lo que le ha pasado:
Ahora, si lo que querían era llamar la atención a cualquier precio, está claro que lo han conseguido. También que muchos vean en el miedo a la competencia el motivo de una campaña así:
Lo que está claro es que nunca es un buen negocio una campaña que quiere mover un hashtag y este acaba por llenarse de críticas. En parte es un gran error es no decir para qué es el hashtag ni ofrecer ningún incentivo para usarlo. Si lo pones por ponerlo y encima quieres hacer una campaña polémica, estás dando a todo el mundo un vehículo para criticarte.
Y es exactamente lo que ha ocurrido.