Así de primeras se nos ocurren un buen número de sitios donde practicar sexo antes que hacerlo en mitad de una rotonda, pero al parecer los noruegos llevan haciéndolo allí un montón de años. En el país nórdico existe una tradición entre los estudiantes que se gradúan en el instituto en la que se pasan un mes entero de fiesta, entregados al alcohol y todo tipo de retos que van cumpliendo.
En la celebración, que recibe el nombre de Russ, se llevan a cabo cosas más ligeritas, como hacer pintadas, y otras algo más osadas, como esta de ponerse al tema a la vista de todos los conductores, algo que ahora el Gobierno noruego quiere parar por considerarlo peligroso para la seguridad vial. "No al sexo en las rotondas" es el lema de la iniciativa gubernamental que trata de frenar esta costumbre tan poco ortodoxa.
Recoge Euronews que la exministra de Transporte, Terje Moe Gustavsen, que ahora dirige el organismo que gestiona las carreteras públicas del país, ha asegurado que estas prácticas podrían resultar "demasiado sorprendentes" para los conductores. El Russ comienza alrededor del 20 de abril y se prolonga hasta el 17 de mayo, el Día Nacional de Noruega.
Los estudiantes recorren durante este tiempo las ciudades en furgonetas pintadas de rojo y azul, que también les sirven para dar rienda a sus pasiones en la vía pública. Gustavsen apuntó que "todos tienden a estar en rotondas y coincidir con ellos es un peligro para el tráfico. (...) Los conductores pueden sorprenderse demasiado al verlos y olvidar que están al volante".