Hace 28 años que la Organización Mundial de la Salud retiró la homosexualidad de su lista de enfermedades mentales, pero todavía hay personas que siguen temiendo que se les contagie "el mariconismo" y no dudan a la hora de recomendar "un centro" a los gays para que "se curen".
Este es el panorama con el que tiene que lidiar a diario en su vecindario Israel C.N., un joven zaragozano que ha denunciado amenazas homófobas después de que sus padres hayan recibido sendas cartas de vecinos diciéndoles, entre otras perlas, que "tomasen medidas" para que la homosexualidad de su hijo no causase problemas en la comunidad.
Los escritos llegaron tras el paso de Israel por el Programa La vida que nos ha tocado, de Aragón Televisión, desde donde habló del acoso que sufre cuando sale a la calle. Insultos, comentarios desagradables, agresiones físicas... Toda una pesadilla que el joven asegura que comenzó cuando volvió a su ciudad después de un tiempo viviendo en Barcelona.
Así lo explicaba en la televisión:
Poco tiempo después de emitirse el programa aparecieron dos cartas en el buzón de los padres de Israel, remitidas por vecinos de la urbanización en la que viven. Con un "estimados vecinos" en el encabezamiento comienza una retahíla de comentarios homófobos que parecen más bien del siglo pasado: "¿Qué pasará cuando nuestros nietos se hagan mayores y vean semejante maricón?".
"Que le curen el mariconismo"
Los vecinos continúan su argumentación alegando que por motivos de "seguridad y salud" sería conveniente que "lo llevéis a un centro para que le curéis el mariconismo". Aseguran que "en otras épocas ya se habría hecho justicia" con el joven porque "estas personas ya no tendrían que nacer".
El vecino homófobo sigue, asegurando que "mi familia y yo queremos una vida sana y sin contagiarnos por mariconismo", amenazando con convocar una reunión de la comunidad para tratar el tema, ya que "en la piscina comunitaria hay niños" y "no tenemos que indigestarnos viendo a un ser que tiene anorexia y que no sabe su género sexual".
En la segunda carta se citan las supuestas "enfermedades raras" que podrían "infectarme de homosexualidad", pidiéndole a Israel que "mida el nivel de pluma" y que "no traiga a ningún homosexual". También le recuerdan que "el pasillo comunitario no es la fashion weekend" para acabar advirtiendo de que "si no toman cartas en el asunto las tomaré yo y será muy duro y drástico".
Israel ha confirmado que han interpuesto una denuncia ante la policía y, de hecho, el sello que aparece en las capturas de las cartas es el del registro. Colectivos como LGTB+ Hu-Entiende y Towanda le están prestando apoyo y asesoramiento.