El hombre que protagoniza nuestra siguiente historia seguramente se ha llevado el sustazo de su vida. Ocurrió en Jiamusi, Heilongjiang (China), y las imágenes que ha captado una de las cámaras de seguridad están dando la vuelta al mundo al recoger a la perfección el momento en el que el octogenario se esfuma como por arte de magia.
El hombre, de 80 años, caminaba tranquilo por una zona de aparcamiento cuando, de repente, se abrió un agujero en el asfalto bajo sus pies que se lo tragó en un segundo mientras algunos testigos se quedaban ojipláticos con la secuencia.
Algunos se acercaron al hombre para ver si estaba en buen estado e informaron a sus familiares de lo sucedido, telefoneando también a los equipos de emergencia. Otras personas acudieron en su ayuda y pudieron sacarlo antes de que llegase la ambulancia, que después lo condujo al hospital para recibir asistencia aunque milagrosamente solo tuvo heridas leves.
Según las autoridades, el agujero tenía un metro de ancho y 1,2 metros de profundidad. La policía aseguró que habían puesto letreros advirtiendo del peligro, pero alguien los había apartado y el anciano no los pudo ver.