El procés es una de esas series que se han vuelto demasiado largas y ya cansan, las temporadas pasan sin que avance la trama, los personajes más reconocibles dejan la serie o pasan a ser secundarios, y quienes los sustituyen son versiones de Hacendado. Eso no quita que, de vez en cuando, den grandes momentos. Y en ese sentido la creatividad independentista nunca decepciona.
Por todos era conocida la bizarra obsesión de los catalanes por la mierda -el caganer, el Caga tió o la tradicional canción infantil La merda de la muntanya no fa pudor-, pero el procés nos ha permitido descubrir una nueva obsesión, quizá algo más trascendental: la muerte. Y es que después de habernos pasado el verano viendo cruces en las playas, ahora podemos ver manifestaciones en las que portan un ataúd. Casi como una procesión de Semana Santa.
Pero al menos ahí tenemos una metáfora -porque hablan de muerte de las libertades y tal-. Hay otras imágenes que buscarle un significado es bastante más complicado.
En el aniversario del 1-O, los indepes trataron de colapsar Cataluña, cortando carreteras con infranqueables barreras humanas como esta:
Pero una cosa hay que reconocer a los indepes, y esa es su capacidad de internacionalizar el conflicto. No hay más que ver la masa de gente que se acumuló delante de la embajada española en Bogotá. Imparables:
Y luego está esa modernidad catalana frente al apolillamiento castellano. No hay más que ver el homenaje a las "víctimas" del 1 de octubre.
Y su capacidad artística. Desde Dalí no se vio un realismo similar:
Cuando animas a la gente a salir a la calle para defender una mentira, es posible que finalmente se den cuenta de que les estás engañando, se enfaden y te la líen. Por suerte, ante eso tenemos a los mossos, siempre dispuestos a hacer su trabajo.
Pero ya sabéis eso de "a nosotros solo nos pegan los mossos":
Incluso puede pasar que la speaker de un evento se moleste y te critique contigo delante. Pero no pasa nada, aquí se puede sustituir a alguien en un contraplano:
Es como cuando en una serie se te va un actor pero tú no quieres matar al personaje.
Pero el pollo del aniversario del 1-O empezó, en realidad, el sábado, con la manifestación en Barcelona de policías que querían pedir una equiparación salarial y, de paso, rendir homenaje a quienes participaron en el dispositivo de hace un año.
Los manifestantes tiraron pintura a los mossos, dejando algunas imágenes para el recuerdo.
Y una cosa está claro, no se podrá negar la capacidad de los indepes para promocionar el turismo en Cataluña:
Al final tanta lata para que esto del procés acabe siendo algo folclórico y la gente venga a verlo y hacerse fotos, como los Guardias Reales de Londres o los mariachis en México.