Aluvión de voluntarios en las puertas del Hôpital Saint-Antoine, un complejo hospitalario situado en la zona este de París que ha lanzado un llamamiento solicitando personas que les proporcionen muestras de heces a cambio de 50 euros. El objetivo es realizar un seguimiento para obtener datos y tratamientos que se emplearán en una investigación médica.
La convocatoria está dirigida a personas sanas con edades comprendidas entre los 18 y los 49 años, que no estén a tratamiento y pertenezcan al sistema sanitario francés. Tras una primera muestra, aquellos que sean seleccionados tendrán que contribuir con algunas durante algún tiempo recibiendo una remuneración a cambio.
El estudio pretende evaluar la eficacia del transplante de microbiota fecal en la evolución de las enfermedades inflamatorias intestinales. Consiste en administrar una solución de materia fecal de un donante al tracto intestinal del paciente para cambiar la composición microbiana del receptor y mejorar su salud. Un tratamiento autorizado en Francia desde 2014 que se realiza solamente en 30 hospitales.
El teléfono colapsado
La peculiaridad de la oferta del hospital consiguió que el anuncio se hiciera viral y los voluntarios hayan colapsado las vías de contacto con los responsables del estudio. "Es una catástrofe, es desastroso. La noticia saltó, recibimos miles de correos electrónicos, la gente vino directamente al hospital a dar sus heces... Pero esto no es así, hay que cubrir un cuestionario, hacer análisis de sangre", lamentó Harry Sokol, uno de los investigadores.
El experto explica en la edición francesa de 20 Minutos que "la situación se había vuelto inmanejable", se han visto obligados a detener la convocatoria de donaciones y, por lo tanto, a suspender un estudio que es muy necesario: "es grave, hay pacientes esperando un transplante. Espero que podamos hacerlo en el futuro".