A la mayoría de gente le gusta pasear por la playa o por el bosque. Por lo general, caminos tranquilos y relajantes. Pero Kilian Jornet tiene otros gustos. El de Sabadell, que vive en Noruega con su mujer, es conocido por 'barbaridades' como subir el Cervino (4.478 m.) dos veces en un día cuando un alpinista normal tarda una jornada como mínimo en completar el ascenso.
De naturaleza muy reservada, el de Sabadell compartió en redes sociales un vídeo en el que mostraba uno de sus senderos favoritos. Hasta ahí, nada fuera de lo normal: una celebridad mostrando algo que le gusta. Pero el paseíto de Jornet ha resultado ser un estrechísimo sendero rocoso, al borde de un precipicio no precisamente pequeño.
Y lejos de moverse con cuidado, como lo haría cualquier mortal, bien pegadito a la pared, él corretea como una cabra montesa mientras graba el vídeo.
El vídeo pone los pelos de punta y no ha dejado a nadie indiferente. "A un servidor, que el lugar más peligroso donde entrena es la Carretera de las Aguas [una carretera que recorre el Tibidabo, en las afueras de Barcelona], le pone los pelos de punta ver dónde lo hace Kilian Jornet", escribió un tuitero que compartió el vídeo.
La respuesta de Jornet deja clara su filosofía. "Bien, aquí no hay el peligro de coches y otros del aire contaminado. Todo depende de con qué peligros estemos más a gusto", contestó el superatleta, que siempre ha dejado claro que en la ciudad y la civilización en general no es donde más a gusto se siente.
La semana pasada ya estuvo en La Resistencia, donde se sometió al siempre inquisidor David Broncano. Dio pistas sobre sus pulsaciones durante el sexo y sorprendió al compararse no ya con otros humanos al correr, sino con animales de montaña.
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