No se trata, ni mucho menos, de un debate nuevo; pero sí de un tema recurrente que ha llegado a enfrentar a compañeros de trabajo que son padres y a los que no lo son. La situación ocurre a menudo: personas con hijos a su cargo reclaman para sí una empatía que acaba traduciéndose en facilidades para conciliar su vida laboral y familiar.
Ciertas ventajas a la hora de fijar el calendario de vacaciones, de escoger turnos y, en definitiva, de obtener flexibilidad de los jefes. Los hijos suponen una coartada perfecta a todos los efectos y eso puede llegar a calentar mucho el ambiente de la oficina. De un tiempo a esta parte, las personas sin cargar familiares han empezado a reivindicar su derecho a la conciliación.
Vale que el tiempo no van a emplearlo en cuidar a terceros, pero sí a ellos mismos, algo que no es precisamente un lujo. La periodista Laura Cornejo ha sido una de las últimas en sacar el tema a colación en las redes sociales. Ha explicado que no se refiere a su propia circunstancia, pero sí a la de muchos de sus contactos que se quejan a diario.
Su alegato a favor de un trato laboral más igualitario entre los conhijos y los sinhijos no ha tardado en hacerse viral:
Aunque ha cosechado bastantes aplausos, en su reflexión también se ha topado a bastantes conhijos discrepando de su parecer:
De momento, parece que ellos van ganando.
[Más información: Vox reparte figuritas de fetos y Twitter se mofa: "Te ha tocado el haba"]