El épico zasca de Cifuentes a Errejón por su doble rasero tras los escraches a Iglesias y Montero

El acoso a Pablo Iglesias e Irene Montero en Asturias que provocó que sus vacaciones finalizasen antes de tiempo sigue dando de qué hablar. Han sido muchos los líderes políticos que han defendido el derecho de la pareja a tener días de tranquilidad con su familia. Algunos, como la ministra de Defensa, Margarita Robles, dejando claro que los escraches han de condenarse sea quien sea la víctima.

En este contexto el líder de Más País y cofundador de Podemos con Iglesias, Íñigo Errejón, ha roto una lanza a favor de sus excompañeros de partido. El diputado ha escrito en su cuenta de Twitter un mensaje donde aseguraba que "un escrache es una forma de protesta puntual que visibiliza una problemática social y da voz a quien no la tiene".

Sin embargo, para Errejón, "el acoso a Pablo Iglesias e Irene Montero es persecución ideológica intolerable" y se pregunta en cuáles serían "las consecuencias que tendría si fuesen otros". El político se une así a las denuncias de otras voces cercanas a Podemos que piden a la Policía y la Guardia Civil que investiguen si hay delito en los hechos que propiciaron la huida de la pareja del pueblo asturiano donde estaban.

Con lo que no contaba Errejón es con la respuesta de una persona que también ha sufrido en sus propias carnes (y en las de su familia) las consecuencias de los escraches. Se trata de la expresidenta de la Comunidad de Madrid, Cristina Cifuentes, que ahora no se calla ni una al otro lado del teclado desde su cuenta de Twitter.

Cifuentes tachó de "intolerable" que Errejón "justifique ninguna clase de escrache" y pregunta, retóricamente, si es que sus hijos son "de peor condición" que los de Iglesias y Montero":

En los comentarios de varios tuiteros, Cifuentes ahondó en que su familia "sufrió acoso continuado durante meses en el portal de mi casa. Mis hijos ni se atrevían a salir. Así hasta que nos mudamos". Además, recordó que ella siempre ha condenado los escraches: "todos y siempre, se hicieran a quien se hicieran. Antes y ahora. A diferencia de ellos que los alentaban, justificaban (algunos como Errejón aun lo hacen) e incluso participaban en los mismos".