Una de las poquísimas cosas positivas que tendrá esta Navidad es que al menguar las mesas también se reducirán al máximo las probabilidades de acabar teniendo una discusión política entre familiares. Que sean muchas menos las personas con las que compartiremos gambas y turrón, a priori, nos librará de las tediosas conversaciones polémicas que provocan un innecesario cisma cada año para disgusto de abuelos y niños.
Sin embargo, hay quien no solo cree que sí se darán este tipo de debates sino que instan animadamente a que se produzcan, como el vicepresidente segundo Pablo Iglesias. Así lo ha trasladado este pasado fin de semana en su particular mensaje navideño, un fragmento del discurso que ha pronunciado en la apertura del Consejo Ciudadano Estatal de Podemos que se ha celebrado de forma telemática para analizar la situación política y su labor al frente del Ejecutivo.
Entre varias valoraciones sobre el peso de Podemos en el Gobierno, las tareas que tienen por delante durante el resto de legislatura o las tensiones con el PSOE, Iglesias también ha querido referirse a esa supuesto debate: "Sospecho que esta Nochebuena, muchos compatriotas que estarán siguiendo el discurso del Jefe del Estado se van a preguntar si son monárquicos o republicanos".
"Un horizonte republicano"
"Ese debate se va a dar este año en muchas casas de nuestro país", escribía en Twitter para compartir el vídeo de su discurso, en el que afirmó que "la Monarquía debe estar sometida a la voluntad popular". Según Iglesias, "cada vez más gente tienen claro que ser republicano no es solo lo más democráticos, sino que significa defender los servicios públicos, lo común frente al proyecto privatizador de los monárquicos, un país más justo y más feminista".
El vicepresidente insistió en que "es positivo que las familias puedan debatir en democracia sobre la forma en cómo nos organizamos como sociedad" y recordó que en septiembre ya se había fijado como "tarea fundamental" de Podemos para los "próximos tiempos" el avance hacia lo que ha llamado un "horizonte republicano":
Este inesperado mensaje navideño de Iglesias no ha cuajado en la mayoría de compatriotas a los que se dirigía. Estos, lejos de aplaudir, han saltado como un resorte a enmendarle su profecía, aclarando que lo que menos les importa en estos momentos —en los que echarán de menos al resto de sus familiares— es ese debate sobre la Monarquía o la República:
Las críticas, lejos de minimizarse, han ido en aumento en las últimas horas.