La Organización Mundial de la Salud (OMS) cifra en un 60% el porcentaje de la población europea que está sufriendo la conocida como fatiga pandémica, un compedio de síntomas relacionados con el estrés, la ansiedad, el cansancio y la depresión que derivan de las consecuencias que ha traído consigo la Covid-19. Dentro de poco se cumplirá un año desde que nuestros hábitos de vida sufrieron un cambio radical por culpa del virus.
Se estima que en España un 40% de la población tiene síntomas compatibles con esta fatiga pandémica debido a la incertidumbre constante, el miedo, la distancia social y el tiempo que se pasa en el interior de las viviendas. Este es el motivo, por ejemplo, de que cada vez nos cueste más quedarnos en casa a pesar de que las cifras de la pandemia en esta tercera ola han superado todos los registros.
Pero si a la ciudadanía esta nueva normalidad en convivencia con el virus se nos está haciendo insorportable, es fácil imaginarse el hartazgo que arrastra el personal sanitario. Por si no fueran suficientes su cansancio y la precariedad a la que hacen frente en muchos de los casos, más de un mes después todavía están sufriendo las consecuencias de aquel imprudente salvemos la Navidad y lo hacen de forma estoica.
"Hay que elegir quién vive"
En este contexto, este fin de semana se ha hecho viral en redes sociales el testimonio que una enfermera malagueña ofrecía en Canal Sur. Raquel Romo trabaja en Urgencias en el Hospital Regional de Málaga, el Carlos Haya, y ha querido hacer un llamamiento para que la sociedad no baje la guardia por muy harta que esté, recordando que sigue muriendo gente en soledad y que hay que elegir quién vive.
"Esto es grave cuando a ti te toca. Cuando no te toca, no existe. A mí me gustaría que las personas que dicen eso vinieran ahí dentro donde estoy yo y vieran que se mueren padres, madres, hermanos y mucha gente no ve a su familia, se muere sola", ha relatado la enfermera, visiblemente emocionada, en la televisión autonómica andaluza.
Reiterando que está "cansada" porque no le ve un fin próximo a la situación, ha reconocido que "cuando ya no hay más sitio te preguntas qué hacer con un paciente o dónde ponerlo. Y hay momentos en que hay que elegir quién vive. Y eso es muy duro, pero es así". El fragmento del testimonio de Romo lo ha compartido en Twitter el vicesecretario general del PP de Andalucía y diputado en el parlamento andaluz, Toni Martín:
Con cerca de un millón de reproducciones y otras tantas fuera de Twitter, las palabras de Romo pidiendo entre lágrimas que tengamos "mucho cuidado, que la familia es lo más bonito y la podemos perder en cualquier momento" han provocado decenas de miles de reacciones en la red social, muchas de ellas del propio personal sanitario:
Ojalá sirvan para chutarnos energías renovadas que nos sirvan para resistir ―ahora sí tiene más sentido que nunca— el tiempo que nos queda por delante.