A punto de finalizar un verano negro en materia de incendios forestales, nuestro país es uno de los miembros de la Unión Europea más afectados por la quema de los bosques. Señalan los expertos que la problemática amenaza con intensificarse por los efectos del cambio climático, ya que las olas de calor y las sequías provocan que la humedad de los suelos y la vegetación disminuya, presentando una resistencia menor a las llamas.
Según los datos que se han registrado hasta el 5 de septiembre, en España se han producido 7.244 incendios de los que un 66% se han quedado en fase de conato gracias a los operativos de extinción. En los Grandes Incendios Forestales (GIF) de este año se han quemado 41.206 hectáreas y, en el caso del de Málaga, los investigadores creen que la aridez que ha traído consigo el cambio climático ha intensificado su magnitud.
Sin embargo, hay quien prefiere seguir obviando a las voces expertas en lo que al cambio climático se refiere y uno de ellos es el cantante andaluz José Manuel Soto, que se empeña en minimizar los efectos de un fenómeno constatado por la ciencia desde el sofá de su casa o desde la tumbona de la playa. En uno de sus últimos tuits ha pretendido dar una lección de empirismo tirando de la típica expresión de que tal o cual cosa la "ha habido siempre".
"No me jodan"
Así, el bueno de Soto ha pedido que "no me jodan con que los montes arden por el dicho cambio climático", asegurando que "sequías ha habido siempre" y afirmando que "el monte arde porque está sucio debido al abandono y a la absurda persecución a la que se ha sometido a ganaderos, leñadores, apicultores y todo aquel que tenía en él su forma de vida":
La afirmación de Soto no ha encontrado cuestionamientos entre sus seguidores de Twitter, que han avalado su teoría amplificándola con sus propias experiencias:
Rompiendo una lanza a favor de Soto, conviene aclarar que el origen de los incendios forestales en los países mediterráneos no se puede abordar solamente desde la perspectiva del cambio climático, sino que el asunto es mucho más complejo. Con el éxodo rural, como explicó el cantante, se acabó buena parte del aprovechamiento de los montes con el consecuente aumento de biomasa inflamable, como los propios cultivos abandonados. Insisten los expertos, por lo tanto, en prevenir el impacto de los fuegos gestionando los terrenos agroforestales de forma sostenible y recuperando zonas degradadas.