Los históricos 11 minutos que duró la comparecencia telemática del presidente ucraniano Volodímir Zelenski en el Congreso de los Diputados han removido las entrañas de todo el país. Zelenski, la presidenta del Congreso de los Diputados Meritxell Batet, habló de lo que está sufriendo en pueblo ucraniano y lo comparó con los bombardeos que sufrió Guernica por parte de la aviación nazi en 1937. Aunque su ovacionado discurso apelaba directamente a nuestra empatía, la periodista María Jamardo ha llevado la contraria a Zelenski para indignación de todo el mundo, incluidas las redes sociales.
"Estamos en abril de 2022, pero parece que estuviéramos en abril de 1937, cuando muchos españoles también tenían que esconderse en sótanos y desvanes para sobrevivir a un bombardeo", dijo Zelenski. Las declaraciones de Jamardo en Ya es mediodía, el programa de Telecinco presentado por Sonsoles Ónega, fueron una respuesta al presidente de Ucrania: "Ni el que bombardeaba era tan malo, ni los bombardeados eran tan buenos".
Twitter ha mostrado incredulidad e indignación a partes iguales ante las palabras de Jamardo. Hay que recordar que Guernica fue bombardeada el 26 de abril de 1937 por aviones alemanes e italianos que representaban el apoyo de Mussolini y Hitler a Franco. En aquel momento, la propaganda franquista ya intentó culpar al bando rival de la masacre. Por ello, Twitter ha estallado contra Jamardo, incluidas reconocidas personalidades.
Por otro lado, desde la derecha se ha querido rectificar a Zelenski o, cuanto mínimo, matizarlo. Santiago Abascal, en un hilo de Twitter, ha dicho que "el presidente ucraniano no tiene el deber de conocer nuestra historia, -de hecho el gobierno se empeña en que los españoles también la desconozcan- pero puestos a establecer comparaciones quizá habría sido más acertado hablar de Paracuellos".
La comparación con Paracuellos ha ahondado en la indignación, y ha tenido respuesta en, por ejemplo, el exvicepresidente Pablo Iglesias: "Demuestra básicamente que se dan por aludidos..."
Lo llamativo es que Jamardo, lejos de rectificar, ha persistido en su versión. "¿Barbaridad? Falsear la historia. Y sí, se puede dar una opinión libremente en televisión. Se llama libertad de información", se ha justificado en Twitter.