Una de las modas que conviene erradicar cuanto antes es esa de la sinceridad no pedida. En nombre de no sé muy bien qué, hay gente soltándole a otra lo primero que se le pasa por la cabeza, obviando si puede ser dañino o no para el otro, y escudándose en que "es que soy muy sincero". Pues no lo seas tanto, amigo. O amiga, en este caso, porque la protagonista de nuestra historia es Carmen, una mujer que fue a First Dates y protagonizó un bochornoso momento minando la autoestima de su cita, Luis.
El programa de Cuatro emitió la no cita de ambos a finales del pasado mes de junio, pero las redes sociales lo han hecho tremendamente viral estos días suscitando el debate en torno al comportamiento de la mujer, a la que Carlos Sobera le tuvo que pedir que dejase de "machacar" al hombre que la esperaba ilusionado. Al cruzar el umbral y ver a su cita, Carmen ya se cruzó y a preguntas del presentador dijo que no le gustaba.
Presentación oficial, dos besos, sentados a la barra y Carmen dispuesta a no guardarse nada para sí: "Sois unos canallas, no eres mi prototipo para nada", espetó al pobre Luis, que aguantó la embestida como pudo. Ella, confesando que se esperaba a un hombre más del estilo de Matías, el camarero, siguió con su honestidad brutal: "¿Para esto me habéis hecho venir?", preguntó, poco antes de anunciar que no quería "ser desagradable, pero no voy a cenar contigo".
"¿Sincera o maleducada?"
Luis ―suponemos que debatiéndose entre el bajón de autoestima y el alivio de haberse librado de hora y media de sinceridad no pedida con Carmen a la mesa―, le dijo con naturalidad que "como tú quieras. Ha venido a buscar un prototipo de hombre y ya está. No le ha dado tiempo a conocer a la persona. Si no quiere no se le puede obligar". Después, en la entrevista individual, ella confirmaba para los despistados que "soy muy clara, la chica más directa y clara que te puedas echar a la cara, y no me voy a quedar a cenar con alguien que no me gusta. No es lo que he pedido a los reyes".
Aunque en su momento tampoco pasó desapercibido, el plantón de Carmen se ha viralizado estos días gracias a la cuenta Maruja Desesperada, que ha planteado un debate en Twitter preguntando si había sido sincera o maleducada. Ana Milán y cientos de personas más han querido opinar y estos son algunos de sus comentarios:
Claramente gana por goleada la mala educación de Carmen, que debería ponerle algún filtro a su mal llamada sinceridad.