El Partido Popular de Galicia ha vuelto a emplear uno de los patrimonios inmateriales de los gallegos para felicitar la Navidad: la retranca. Lo habían hecho desde la Xunta de Galicia en diciembre de 2019, cuando jugaron con el parecido entre Alberto Núñez Feijóo y el actor Luis Zahera para su vídeo navideño, pero en esta ocasión no han tenido que llamar a ningún intérprete ajeno al PP porque la verdadera estrella la tienen entre sus filas y se llama Mariano Rajoy.
Su aparición estelar en la felicitación del presidente Alfonso Rueda está dando mucho juego en las redes sociales, a sabiendas de que el expresidente del Gobierno es uno de los personajes a los que más se echa de menos. De hecho, sus hilarantes frases siguen formando parte del imaginario colectivo e incluso se bromea a menudo con la idea de que Feijóo tiende a imitarlo últimamente. No obstante, el cameo de Rajoy no se queda en una simple imagen, puesto que llega a parodiarse a sí mismo en una de sus clásicas caminatas e incluso a hablar en gallego.
Toda una rareza viniendo en Rajoy que, a pesar de haber nacido en Santiago de Compostela y haber vivido parte de su vida en Galicia, no se le había escuchado ni una expresión en este idioma. "Ata logo!", le dice aquí a un Rueda que se recorre los 313 municipios gallegos en su moto, recogiendo los deseos de la gente en simbólicas bolas navideñas y dándose a conocer entre quienes todavía se piensan que el presidente gallego es Feijóo. Que, como las meigas, haberlos hailos.
Feijóo, solo en WhatsApp
Una de las grandezas del vídeo del PP gallego ―mucho más amable que el de Génova con la lotería, todo hay que decirlo―, es reconocer que uno de los puntos débiles del recién estrenado presidente Rueda es precisamente que la gente no lo conoce demasiado aunque llevaba de conselleiro desde 2009. Esto se debe, en gran parte, porque Feijóo ejercía una presidencia muy personalista y su imagen prevalecía. Quizás por eso, en el spot solamente se ve al líder nacional en una fotografía de WhatsApp:
Feijóo cede ese testigo, Rueda coge la moto con una mochila del Xacobeo y sale a la carretera sin olvidarse de llevarse consigo unas viandas preparadas por su madre. Le suena a unas señoras, que le llaman guapo, y continúa su camino mostrando el paisaje gallego. De repente, saluda a alguien con un par de pitidos y es él: Rajoy. "Vai sobre ruedas!", le dice, en una mezcla de gallego y español que en Galicia se llama castrapo, firmando un cameo para el recuerdo.
Rueda llega finalmente a la sede del PP de Galicia en Santiago de Compostela y el vigilante no lo deja aparcar en el lugar del presidente. "¡Pero si soy yo!", le explica, mientras el joven admite que no lo había reconocido. Una vez más, el chascarrillo: "No te preocupes, hombre, ¡si fueras el primero!". La secretaria xeral del PPdeG, Paula Prado, y los cuatro presidentes del partido en las provincias ―Elena Candia (Lugo), Luis López (Pontevedra), Manuel Baltar (Ourense) y Diego Calvo (A Coruña)― lo están esperando para poner el árbol.
Su modelo de jersey navideño tampoco ha pasado desapercibido en Twitter, pero ni eso ha podido hacerle sombra al protagonista indiscutible de la campaña:
Ha nacido una estrella.