Al estilo de los monologuistas, Sánchez ha hecho un guiño este miércoles a quienes lo escuchaban en la sede de UGT para dar algunas claves sobre lo que es ser un "ultraderechista", asegurando que era un "método" de detección infalible. El presidente del Gobierno ha estado inaugurando las jornadas confederales de acción sindical de la organización y ha defendido en su discurso las medidas que ha tomado el Ejecutivo en defensa de las clases medias y trabajadoras, comprometiéndose a seguir en esa misma línea.
"Por mucho que a algunos les pese, el apocalipsis no ha llegado ni va a llegar", ha dicho el presidente, presumiendo de que "en la vía progresista, España crece sin devaluar salarios ni precarizar empleos". Sánchez ha valorado que el Gobierno ha "parado dos crisis sucesivas sobre la clase media y la clase trabajadora" y también ha tenido un cariñoso recuerdo para el que fuera secretario general de UGT, Nicolás Redondo, recientemente fallecido: "Un hombre imprescindible para la lucha sindicalista".
Entretanto, Sánchez también encontró hueco en su discurso para abordar el asalto a las sedes de los poderes democráticos en Brasil contra la victoria del Partido del Trabajo y fue en este punto cuando avanzó al auditorio que si querían "reconocer a un ultraderechista, hay un método que no falla". En este sentido, argumentó que "siempre se opone a cualquier avance social", empezó el socialista, enumerando después que "se opone a la subida del salario mínimo" y se "opone a la subida de las pensiones".
"Método para reconocer a la ultraderecha"
Ha continuado Sánchez diciendo que un ultraderechista es aquel que "se opone a reducir la precariedad laboral, el ingreso mínimo vital diciendo que es una paguita, a la fiscalidad justa, a las políticas de igualdad entre hombres y mujeres" y que además "niega la evidencia científica de que estamos ante una emergencia climática y, cuando no consigue bloquear estos avances por vías democráticas porque la ciudadanía les da la espalda, lo que hacen es oponerse a la democracia y recurrir al asalto de las instituciones democráticas":
La cuenta del presidente del Gobierno en Twitter ha subido el vídeo de su intervención, provocando un gran revuelo y superando un alcance de 230.000 usuarios de la red social. Entre las variadas réplicas que está teniendo, son decenas los tuiteros que han querido recordarle otros "métodos" en forma de zascas para sacarle los colores a partir de su discurso:
El método para hacerse viral al menos sí lo tiene controlado el presidente.