No ha habido sorpresas en la votación de la moción de censura: ha sido rechazada al contar únicamente con los votos a favor de Vox y Pablo Cambronero, un tránsfuga de Ciudadanos. Ramón Tamames podrá al fin descansar después de dos jornadas maratonianas en el Congreso de los Diputados que este miércoles abría la sesión con la intervención de la portavoz popular, Cuca Gamarra. Un discurso que ha sido aplaudido y criticado a partes iguales, y uno de los haters ha sido Jorge Javier Vázquez.
Gamarra ha defendido la decisión de su grupo de no decantarse por ninguna de las posturas dominantes: ni del lado de los convocantes ni del Gobierno. Ha pronunciado un encendido discurso de una media hora cargando contra Pedro Sánchez y Santiago Abascal, por ser el "semipresidente" del Ejecutivo más "caótico, cainita e inestable de la Unión Europea" y por promover un pleno "extemporáneo", respectivamente.
No obstante, Gamarra ha expresado su "respeto" por el candidato Ramón Tamames, del que ha referido un "afecto personal" y una admiración por "representar una España de la reconciliación y de la Transición". Le ha espetado, eso sí, que el país "está esperando una alternativa, pero no es usted", explicando que no iban a votar a favor "por respeto a los españoles y a usted, aquí no hay lugar para la política frívola" y concluyendo que la moción ha sido "el epílogo de una etapa política que estamos camino de superar".
Reiterando que el tiempo de Sánchez se ha acabado, Gamarra ha finalizado su intervención entre los aplausos de los suyos, que han resonado también en las redes sociales. No obstante, en estos canales también se han registrado críticas, entre ellas la del presentador Jorge Javier Vázquez, que últimamente no deja de significarse políticamente sin pudor. El de Mediaset ha escrito un tuit en el que aseguró que mientras hablaba la portavoz del PP "mi tele se ha puesto en blanco y negro", aludiendo a un argumentario como de otra época:
El zasca de Jorge Javier a Gamarra ha resonado fuerte, consiguiendo el beneplácito de algunos, pero también una lluvia de críticas como estas:
Todo un zasca bumerán.