El problema, al parecer, han sido una crítica. Después de una visita a su local, una clienta escribió: "Mi única opción era el plato de vegetales. Estaba bien, pero no llenaba tanto. Y me sorprendió ver que costaba 32 dólares (australianos, unos 25 euros)". "Creo que es increíblemente importante hoy en día que los restaurantes puedan acomodar a todos. No tener comidas a base de plantas muestra tus deficiencias como chef. Si no te adaptas a los tiempos, no tengo fe en que tu sitio sea el que lo haga", añadía.

Tal reseña enervó al responsable del establecimiento, que tomó una decisión drástica. John Mountain, cocinero británico asentado en Australia, no se quedó callado. Este profesional había llegado a Perth, una ciudad del este del país, en 2016. Antes, su trabajo radicaba en Inglaterra, de donde es oriundo. Apareció en el programa 'Great British Menu' de la BBC. Una especie de MasterChef donde los mejores chefs británicos compiten entre sí y son puntuados por un grupo de jueces.

Mountain se instaló en las antípodas y montó Fyre, un local que presume de servir platos a la brasa. En redes sociales, es habitual ver cómo muestra sus creaciones de carne o pescado con recetas artesanales. La controversia con quienes llevan una dieta que excluye estos alimentos (y cualquiera que tenga procedencia animal), ha sido un capítulo reciente que ha levantado una polvareda mediática y digital. Justo a alguien que había mudado a estas latitudes en busca de tranquilidad, según anotó.

"Desafortunadamente, todos los veganos ahora están prohibidos en Fyre (por razones de salud mental)", compartió en sus redes sociales. "Gracias por su comprensión", sentenció. Según comentó, le enfadó el tono de la queja mencionada. "Entiendo de dónde vienen los veganos, pero mi trabajo es hacer que la comida sepa lo mejor que pueda y no siempre puedo satisfacer los requisitos dietéticos de todos", argumentó el chef.

No quedó ahí la cosa. Mountain, en declaraciones a The West Australian, quiso dar su versión de lo ocurrido, puntualizando que todo empezó en el momento de formalizar la reserva. "Una chica llamó, preguntando por opciones veganas. Le dije que sí, que teníamos algunas cosas, pero cuando llegó a la cita yo estaba demasiado ocupado atendiendo un catering y se nos olvidó, así que luego nos atacó en Facebook".

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La clienta llegó a afirmar que su restaurante "no va a durar mucho”. Y el chef siguió la discusión en Facebook: "Los veganos y veganas son una minoría en la zona. No vamos a servirte más. Siéntete libre para compartir tu mierda de opinión. Espero no volver a verte. ¡Qué infantil! Tú y todos tus colegas veganos podéis iros a disfrutar de vuestros platos a otro sitio. Ahora estás vetada", apuntó.

Según Mountain, desde entonces el restaurante se ha visto inundado en Internet de críticas negativas, aunque algunos también se han unido para defender su establecimiento. "A la mierda los veganos. En serio, he terminado", comentó al citado medio australiano. "Al fin y al cabo, no es lo que quiero hacer, que se jodan". Muchos han entrado también al debate. Algunos, para criticarle directamente. Otros para respaldarle. "No tienes por qué prohibir, simplemente no des la opción y se irán a otro lado", mediaba uno.

A Mountain, la discusión no le ha callado. "No me importa si eres verde, amarillo, naranja, podrías ser mexicano, me importa un carajo. Si tratas de dañar mi negocio, si vienes a por mí, vas a tener la ira de Johnny Chuffin Mountain contra ti", espetó en un vídeo después de que hasta el activista Tash Peterson intentara convocar una manifestación en su contra. 

Multiplica las reservas 

También bromeó Mountain diciendo que siempre sabe cuándo hay un vegano en su restaurante. "Siempre sabes cuándo tienes un vegano en tu restaurante porque te dirán 17 veces que son veganos antes de que siquiera pongan un pie en tu edificio", explicó, agregando que el local ha ganado clientela.

"Las cosas han salido ridículamente bien. Por lo general, atiendo a media docena de personas en este hermoso restaurante. Ahora tengo 35 reservadas para cenar", confesó, refiriéndose a la noche de este miércoles. "Muchas gracias a los veganos, ahora puedo ir a comprar una nueva granja y cuidar a mis animales maravillosamente", sentenció.