Llevar una tarta comprada de antemano al restaurante donde se celebra un cumpleaños es una práctica habitual en España, sobre todo cuando el local no dispone de repostería y normalmente habiendo pedido permiso previamente. Lo que no es tan común es que te cobren por servirla y eso es lo que indignó a la joven Saray Solar al comprobar en la cuenta que debía pagar 1 euro por persona para cubrir el gasto. Ahora un hostelero ha querido explicarle los motivos.
La protesta viral de Saray nos remonta al pasado 24 de septiembre, cuando la joven compartió un vídeo en las redes sociales que supera los dos millones de reproducciones. Celebraba un cumpleaños con 16 amigos más en lo local de Almería donde consumieron cervezas, copas, vinos, tintos de verano y tapas de alitas, costilla de ternera, ensaladilla o hamburguesas, entre otras cosas. En mitad de la cuenta, aparece un concepto de "servicio de tarta" a un euro por persona, con lo que tuvieron que pagar 17 euros.
El procedimiento que habían seguido era el habitual, llevando la tarta, pidiendo que se la guardaran y la sacaran después en el postre. La indignación de la joven no tardó en popularizar las imágenes y también en generar debates en torno a esta práctica que no se había visto mucho hasta el momento. A un lado estaban aquellos que, como la joven, se mostraban escandalizados por el cobro, y los que están de acuerdo con el establecimiento:
Días más tarde, aunque el algoritmo de TikTok ha querido viralizarlo en estos días, Rafael Serrano, de la Taberna Serrano en El Vendrell, Tarragona, salía en defensa del hostelero. Recordando el vídeo de la joven, añadía que "pues claro, muchacha, que se cobra un euro por persona y poco me parece. ¿Os traéis una tarta para 17 personas? Se os pone una mesa, una silla, cuchillos, tenedores, platos... ¿y lo queréis gratis? Evidentemente, no", criticaba.
"Afortunadamente, cada día la hostelería está cambiando", celebraba, reflexionando que "en mi local, si me lo pide alguien le digo que no hay ningún problema que se traiga la tarta, pero según qué mesa". A Rafael le parece que los 260 euros que se gastaron entre 17 no son suficientes como para que el hostelero tenga un detalle: "En un restaurante habéis liado un pollo de puta madre, porque normalmente en los cumpleaños se olvidan que hay más gente y hacen jaleo, molestan al resto".
"Poco me ha parecido"
Expone también que en el caso de que haya una alerta alimentaria "tenéis que ir con el tique de esa tarta, tener identificado la trazabilidad del producto", insistiendo en que "no es tan fácil como lo veis": "La gente que se suele quejar por esto son los que trabajan por dinero, pero parece que el resto no trabajamos por dinero, ¿lo hacemos por amor al arte? Pues claro que sí, me parece perfecto y poco me ha parecido", concluye.
El vídeo supera las 555.000 reproducciones.