La polémica acompaña a las influencers. Expuestas continuamente al escrutinio público, estas generadoras de opinión a veces suscitan apoyos y otras rivalidades. En este caso ha sido lo último. Giulia Nati, modelo italiana con un millón de seguidores en Instagram, ha recibido miles de críticas tras una publicación en la que finge estar hospitalizada.
En el vídeo, ya eliminado, Nati -que también se describe como empresaria y emprendedora- aparece en una cama con aspecto enfermizo y tiene una vía puesta en el brazo que, en vez de ir a una bolsa medicinal, está enganchado a un gran bolso rojo de lujo de la marca Hermès. En la mesilla, además, la observan numerosas versiones similares de este accesorio, pero en menor tamaño y diferentes colores. "Necesito un nuevo deseo", bromeaba.
La captura no tardó en hacerse viral. Y en él se veía un mensaje de otra influencer, Carolina Marconi. Esta mujer, de 45 años, es conocida en el país mediterráneo por haber participado en la versión italiana de Gran Hermano. "Como ex paciente de cáncer, esta imagen no me hace reír, de hecho, me parece muy triste", criticaba con dureza. "Te llevaría a recorrer los hospitales para entender realmente las condiciones en las que se encuentran los enfermos y luego vemos cómo te sientes al publicar esto", apostillaba.
Nati decidió borrar la publicación después del revuelo. Además, subió un comunicado en sus 'stories' el que defendía que tenía "17.000 'me gustas' y 700 comentarios" de personas que "sí habían entendido el vídeo" y 2.000 comentarios de gente que le estaba amenazando de muerte. Desde su punto de vista, argumentaba, "no merecía la pena disculparse". En otras entrevistas siguió firme en su postura: no se arrepentía, ya que ella solo quería bromear sobre su "obsesión a los bolsos".
Preocupación por enfermedades degenerativas
Ha habido casos opuestos. Hace unos días, por ejemplo, María Pombo volvía a sacar un tema delicado con el que lleva años lidiando. La influencer anunció así que padecía esclerosis múltiple: "Me han estado haciendo muchísimas pruebas, en la resonancia se vio que tenía una inflamación de médula y la esclerosis múltiple suelen empezar así", revelaba a principios de 2020.
La famosa influencer, de 29 años, expresaba así que podía padecer la misma enfermedad que su progenitora. "No tengo el diagnóstico al cien por cien. Necesito unos días de desconexión para asimilar todo esto", sentenciaba. El resultado definitivo fue afirmativo: Pombo tiene esclerosis múltiple. "Ha sido un jarro de agua fría para todos", expresó en su momento. Aunque no dejaba de preocuparle, se sintió "tremendamente afortunada" porque fuera eso "y no nada más grave".
Pombo relativizó el revés de salud confiando en la ciencia: "Es una enfermedad que ha avanzado muchísimo y sigue avanzando. No tiene nada que ver lo que era hace 20 años con lo que es ahora". Tres años y medio más tarde, la influencer volvió a hablar del tema. Lo hizo este pasado jueves, 25 de enero, en una ronda de preguntas que abría en su cuenta de Instagram.
Uno de sus seguidores se interesaba, muy atento, por cómo lleva su enfermedad María Pombo. "Muy bien", aseguró la influencer tras agradecer por la pregunta. "Es algo en lo que pienso todos los días, a veces me agobia un poco más y a veces me agobia cero, pero sí que está presente", confesó. "Luego, por ejemplo, pues hay temporadas", agregó María Pombo.