Takwa Rejeb, la joven española cuyo instituto le impidió empezar sus estudios por portar un hiyab podrá acudir a clase finalmente después de que la Conselleria de Educación haya "dictado sentencia" sobre el conflicto surgido entre el centro, que se acoge al reglamento interno para impedir el acceso si no se quita el pañuelo de la cabeza, y la alumna, que defiende su derecho a la “libertad personal y religiosa”. “La Conselleria de Educación ha garantizado el derecho a la enseñanza de la alumna y podrá asistir con el hiyab al centro y a todas las clases lectivas”, comunicaban este lunes desde el gabinete de Educación.
La Consellería además ha anunciado que elaborará una normativa sobre la vestimenta en los centros educativos que irá encaminada a garantizar el derecho a la educación y fomentar la diversidad cultural en los centros educativos valencianos y que estaría por encima de las normativas internas de cada centro sobre este aspecto.
Takwa Rejeb, la joven de 22 años que denunció su caso después de haber intentado dialogar con el director, el jefe de estudios y el vicedirector, anuncia que tiene la intención de acudir este mismo martes al IES Benlliure. “Es allí donde tengo matrícula y donde quiero estudiar”, dice. “Han dejado bien claro que podré empezar a ir a clase, iré como si no hubiera pasado nada, iré a ejercer lo que es mi derecho”, ha dicho a EL ESPAÑOL. A Takwa, explica ella misma, le llegaron a decir que ya había habido otros casos en este centro y que la opción era quitárselo o irse a otro instituto.
Rejeb ha explicado que antes de denunciar públicamente su caso estuvo durante una semana intentando que desde el centro dieran marcha atrás a su negativa. “Me parece triste que se tenga que recurrir hasta aquí, no tiene que causar ningún revuelo querer que una persona tenga su identidad, pero entre todos hemos visto que la Constitución es la que manda, así que de lo malo se ha podido sacar lo bueno”, comenta.
"Es mi modo de vida, mi símbolo de identidad"
La joven estudiante denunció su caso el pasado viernes a través de SOS Racisme del País Valencià, Movimiento contra la Intolerancia, el Centro Cultural Islámico y Plataforma contra la Islamofobia. También a través de su perfil de Facebook. Allí expresó su rechazo a que le ordenaran quitarse el hiyab si quería estudiar en el instituto elegido. “No es un complemento, es mi modo de vida, mi símbolo de identidad ¿Me van a venir a decir si debo o no estudiar con él?”, dijo.
De la misma forma se expresó la portavoz del gobierno valenciano y consellera de Igualdad, Mónica Oltra, al manifestar que el pañuelo es “un símbolo religioso, también cultural y de género, como cuando ponemos pendientes a las niñas al nacer” y que se ha de ser muy cuidadoso con la libertad religiosa, la diversidad cultural y la libertad a la imagen. “Las estéticas son diversas en los institutos”, afirmó.
Valencia, pionera en regular la vestimenta
“Aquellas palabras nos gustaron mucho porque supone un cambio”, explica Amparo Sánchez, dela Plataforma contra la Islamofobia. Según explica, la normativa que ha anunciado el gobierno valenciano sería la primera que se elaborara en España para regular este aspecto. Sánchez apunta que hace unas semanas el gobierno vasco, a raíz de un caso similar, mandó una circular dirigida a los centros donde decía que no se podía impedir el acceso por llevar hiyab. “Esto es mejor porque estamos hablando de una normativa”, apunta. La diferencia es fundamental, dice, porque con una normativa se dejaría claro (sin posibilidad de interpretaciones) que “la religión no puede servir de excusa para impedir la educación”. “Es una decisión muy justa y muy inclusiva, además de valiente, han sido pioneros”, recalca.
Desde el centro educativo han descartado hacer cualquier valoración al respecto de la decisión de la Conselleria de Educación que les obliga a dejar entrar a Takwa Rejeb.