Enésima huelga educativa contra la Lomce. Estudiantes y padres intentarán este miércoles “vaciar las aulas” en otra jornada de paros y movilizaciones en todas las comunidades autónomas contra los recortes en educación y las polémicas reválidas, pese a que estas tienen las horas contadas. Ciudadanos ya ha anunciado que el Ministerio de Educación se ha comprometido a realizar una moratoria para que estas pruebas finales de Bachillerato no tengan efectos académicos. Es decir, los alumnos no tendrán que aprobarlas para conseguir los títulos correspondientes.
“No nos creemos los mundos de Yupi que pinta el Partido Popular y Ciudadanos”, ha explicado José Luis Pazos, presidente de la Confederación de Asociaciones de Padres y Madres de Alumnos (CEAPA), principal convocante, junto al Sindicato de Estudiantes, de la huelga de este 26 de octubre.
En la misma línea, la secretaria general del sindicato mayoritario de estudiantes en España, Ana García, ha expresado el rechazo a los últimos pasos dados por el ministro, Íñigo Méndez de Vigo, en su intención de acercarse a la comunidad educativa para lograr consenso que dote de estabilidad al sistema. “No vamos a negociar con un ministro que está invalidado y mantiene unas reválidas franquistas”, asegura García.
Este martes, a tan sólo 24 horas del comienzo de la huelga educativa desde Infantil hasta la Universidad, se filtró el borrador de orden ministerial en el que se recogen los pormenores de las pruebas finales de Bachillerato y ESO. En las líneas de ese texto, poco queda de aquellos exámenes que propuso el exministro José Ignacio Wert, quien pretendía examinar a todos los estudiantes españoles a la misma hora y de las mismas asignaturas para que pudiesen titular.
SERÁ UNA MORATORIA SEGÚN C'S
El borrador dice, literalmente, que “la evaluación final de Bachillerato correspondiente a las dos convocatorias que se realicen en el año 2017 únicamente se tendrán en cuenta para el acceso a la Universidad”. Pero, ¿qué pasa con los años posteriores? En este texto no aparece si en los cursos siguientes sí tendrían el carácter de reválida, como rige la Lomce, o se realizará la moratoria que ya avanzó Ciudadanos.
“Ciudadanos ha conseguido el compromiso del ministro de Educación en funciones para que haya una moratoria en las reválidas, tal y como venimos reclamando”, afirmó el pasado viernes la portavoz de Educación en la formación de Albert Rivera.
Además, añadió que desde el partido tienen “listo” un proyecto de Ley Orgánica que contempla la moratoria de las reválidas, que quedará guardado en el cajón si finalmente, como todo parece, Rajoy vuelve a ser presidente. En este último caso, tal y como dice Ciudadanos, el Ejecutivo presentará un Decreto Ley “en el mismo sentido”: moratoria.
Es a lo que está comprometido el futuro Gobierno de Mariano Rajoy, según el pacto de investidura que acordaron PP y Ciudadanos. En el punto 78, en el que se prioriza la necesidad de impulsar un Pacto Nacional por la Educación que cuente “con el consenso de las fuerzas políticas”.
Líneas más abajo es claro: “Se congelará (durante el tiempo en el que se logre el ansiado pacto) el calendario de implementación de la Lomce en todos aquellos aspectos que no hubiesen entrado en vigor”. Y los únicos elementos que todavía no han entrado en vigor, son las reválidas.
MANIFESTACIÓN MIENTRAS HABLA RAJOY
Este es el panorama que quedará despejado, previsiblemente, a partir del próximo sábado cuando el candidato del Partido Popular a la reelección se convierta de nuevo en presidente del Gobierno. Antes, la huelga educativa, cuyas movilizaciones coincidirán con el inicio de la sesión de investidura.
A las 18:00 horas, la Plataforma Estatal por la Escuela Pública, en la que se integran estudiantes, padres y sindicatos docentes, se concentrarán desde la madrileña Plaza de Neptuno -a escasos metros del Congreso de los Diputados- y pretenderán llegar al Ministerio de Educación, situado en la calle Alcalá. Las protestas serán apoyadas por PSOE, Podemos e Izquierda Unida.