El polémico vídeo en el que obligan a un cerdo a hacer puenting en un parque de atracciones
Lo subieron en un ascensor, le pusieron una capa, arneses y lo precipitaron a 68 metros de altura. La empresa ha pedido disculpas.
20 enero, 2020 17:01Noticias relacionadas
La provincia china de Chongqing ha logrado situarse en el foco mediático de todo el mundo. Aunque no de la mejor manera. Lo ha hecho en la inauguración de una atracción de puenting en un parque de aventuras, donde un cerdo ha sido el primero en estrenarlo, precipitándose 68 metros de altura atado a una polea.
En el vídeo, que se ha hecho viral, se advierte como un cerdo es subido hasta lo más alto de la estructura, primero en un ascensor situado en el centro de la estructura, y luego atado a una polea adornada con guirnaldas. Cuando llega arriba, le atan los arneses alrededor del cuerpo al animal y finalmente lo lanzan.
La inauguración tuvo lugar el pasado sábado, 18 de noviembre, y formaba parte de una acción de marketing para dar a conocer la nueva atracción. El cerdo pesaba alrededor de 75 kilos y en el video puede advertirse como el animal, al que le ponen una capa morada, grita mientras desciende atado.
Después, al matadero
Algunos medios aseguran que, después del evento, el animal fue enviado directamente a un matadero.
Tras publicar el video, las criticas no cesaron tanto en el país asiático como fuera. Lo que ha llevado a los responsables del parque de atracciones a pedir perdón en un comunicado: "Aceptamos sinceramente las críticas y consejos de los internautas y pedimos disculpas al público. Mejoraremos nuestras políticas de marketing para proporcionar a los turistas mejores servicios".
La organización animalista PETA ha condenó el incidente, calificándolo de "crueldad animal en su mayor grado". Jason Baker, uno de sus vicepresidentes, ha explicado que "los cerdos experimentan dolor y miedo de la misma manera que las personas y este truco repugnante de marketing debería ser ilegal".
China no castiga el maltrato animal por ley, algo que muchos activistas llevan denunciando durante muchos años. La respuesta que la acción de marketing ha tenido en las redes sociales ha sido muy llamativa, con mensajes como este: "Matar animales para el consumo y tratarlos cruelmente para entretenerse son dos cosas diferentes. No hay necesidad de torturarlos así".