Siete minutos de mensaje a la nación con banda sonora en forma de cacerolada. El Rey Felipe VI, cinco días después de que el Gobierno decretara el estado de alarma por el coronavirus, se ha dirigido a la nación con un histórico discurso televisado en el que ha arengado a la nación para "resistir" ante la pandemia del coronavirus, que deja en España más de 600 muertos. 

La convocatoria espontánea, promocionada en redes sociales, ha tenido un amplio seguimiento en barrios de Madrid y otras ciudades españolas. Gritos de "¿Para qué sirve la monarquía?" o "¡Viva la República!" han resonado en los balcones junto al zumbido de las cacerolas. 

Bajo el hashtag #Coronaciao las redes sociales han recogido el seguimiento de la ruidosa y reinvindicativa iniciativa, que reclamaba que el rey emérito donara a la sanidad pública 100 millones de euros de la presunta herencia a la que ha renunciado este fin de semana el monarca Felipe VI. 

La cuenta oficial de Podemos, partido que gobierna en coalición con Pedro Sánchez, también se ha unido a la crítica con este mensaje en la red social Twitter. 

Los españoles no se conforman por lo hecho ya por Felipe VI, que le ha retirado a su padre la asignación anual de casi 200.000 euros fijada en los Presupuestos Generales del Estado. 

Con la crisis del Covid-19 asolando la sanidad pública, con los médicos doblando turnos, con las UCIs completas, con las empresas promoviendo ERTEs, con el Ejército, Guardia Civil y Policía Nacional en las calles... Todo es poco.

Por eso, le reclaman algo que consideran de justicia: que los 100 millones de euros saudíes vayan a parar a las arcas públicas, a los médicos y enfermeros que están luchando contra la pandemía, a los hospitales depauperados durante la última década.

Noticias relacionadas