La emotiva carta de un enfermo de gripe española en 1919 que podría estar escrita en pleno Covid-19
Recuperada 100 años después, el paciente cuenta su evolución: coinciden síntomas, sensaciones...
1 mayo, 2020 16:12Noticias relacionadas
Comparar la 'gripe española' con el coronavirus es inevitable. Se repiten situaciones, historias... y, sobre todo, la tragedia. Entonces, entre 1928 y 1920, murieron 50 millones de personas; ahora, todo está por concretar. Lo cierto es que las similitudes existen, como queda reflejado en una carta que ha hecho pública Fiona Pepper.
Esta australiana ha compartido, en redes sociales, una carta escrita por su bisabuelo enfermo durante la 'gripe española'. En ella, cuenta lo mal que lo ha pasado, el buen trato recibido por los médicos y la esperanza de volver pronto.
Entonces, el bisabuelo de Fiona tenía 29 años y estaba ingresado en el hospital de Geraldton. 100 años más tarde, ha sido recuperada y publicada en redes sociales. En ella se reflejan todas las semejanzas que existen entre aquella mal llamada 'gripe española' y el coronavirus.
This letter was written in 1919 by my great grandfather while he was in the isolation hospital in Geraldton, struck down with the Spanish flu. The parallels between now and then are stark. Please have a listen to my story that airs today on Fictions https://t.co/6UCejTK7Ub pic.twitter.com/gWMIlwdGgl
— Fiona Pepper (@fi_pep) April 25, 2020
Transcripción de la carta escrita el 17 de septiembre de 1919:
"Mi querida Muriel,
Este es mi primer intento de escribir durante más de un mes, así que espero que seas considerada conmigo. Esto sentado en el balcón, con el abrigo sobre el pijama, con los calcetines y las botas puestos.
Sabes, por supuesto, lo mal que he estado y, en este momento, sabes que estoy muy débil. No puedo vestirme sólo, no puedo hablar correctamente... Si no, te hablaría por teléfono, pero sólo puedo caminar unos veinte metros sin cansarme. Tengo que luchar por mi aliento. Mi corazón está muy débil y hasta que eso no mejore, habrá poca esperanza para mí.
Los días son agradables, pero temo las noches, sin dormir, tosiendo y luchando por respirar. Si me siento como estoy ahora, la respiración no me angustia mucho. Ansío dejar este lugar, pero temo dejar al médico en caso de que tenga un ataque cardíaco que sería fatal.
Mi querida enfermera, una joven de 22 años, ha sido muy amable y considerada conmigo, pero no vino hoy. Espero que no se haya contagiado de la enfermedad, pobre niña.
Me temo que he escrito mucho, todo sobre mí, pero ya sabes dónde están mis pensamientos, contigo, mi querida, y con los niños.
El sol se está poniendo ahora y la enfermera me traerá té en un minuto, así que debo dejarlo.
Sigo siendo tu esposo siempre lleno de amor, Harry".
Pero lamentablemente Harry nunca llegó a casa. El 25 de septiembre de 1919, pocos días después de escribir esa carta, murió.