Con la llegada del verano, miles de españoles comienzan sus ansiadas vacaciones y ponen rumbo a las costas españolas para disfrutar de unas semanas de descanso. Este año, se calcula que el 40% de los ciudadanos de nuestro país han elegido sus vacaciones en el mes de agosto. Por ello, no es de extrañar que los destinos vacacionales preferidos en España ya hayan empezado a registrar durante los primeros días del mes un aumento en el número de visitantes.
Aunque muchos prefieren la montaña, la gran mayoría continúa eligiendo la playa. Pero para poder hacer uso de ella hay que tener en cuenta una serie de normas que son de obligado cumplimiento para todos los usuarios. El uso de las playas en nuestro país está regulado por la Ley de Costas. Sin embargo, los ayuntamientos de los diferentes municipios pueden establecer regulaciones propias a través de sus propias ordenanzas.
Es más que habitual que, en ocasiones, algunos usuarios se salten las normas e incumplan la normativa establecida en las playas. Y es que son tantas las prohibiciones que estas pueden, en ocasiones, llegar a generar dudas entre los bañistas. La mayoría de las normas existentes son de sentido común y parten de la base de tratar de facilitar la convivencia entre los bañistas. Sin embargo, cada año se repite la misma situación: usuarios que incumplen la normativa y que acaban teniendo que hacer frente a multas por su inadecuado comportamiento.
Los lugares en los que los fumadores pueden disfrutar de sus cigarrillos se van limitando con el paso del tiempo cada vez más. Son muchas las comunidades autónomas que, desde la pandemia, no permiten a los clientes fumar en las terrazas de los bares. Estas prohibiciones están llegando ahora a las playas. De hecho, muchas de ellas ya se han definido como espacios libres de humo.
La Ley 22/1988 de Costas establece que cada municipio o ciudad puede fijar su propia normativa en cuanto al tabaco. Sin embargo, en España, ya hay más de 200 playas en las que no se puede fumar. Concretamente, no se puede en 53 playas de Andalucía, 61 de las islas Canarias, en ninguna de Cantabria y en 72 de la Comunidad Valenciana, según datos de la Asociación No fumadores. Dependiendo de la región, las multas pueden ir desde los 30 a los 1.800 euros.
[¿Puedo fumar en la playa? El experto en Derecho responde]
Tampoco se puede en un gran número de playas españoles reservar sitio con las sombrillas. Esta situación es muy común, sobre todo, en las costas andaluzas y en la zona mediterránea. Por ello, han sido muchos los municipios que han incluido esta prohibición en sus ordenanzas municipales. En el caso de Torrox y Vélez-Málaga, las multas por abandonar la sombrilla en la arena para reservar sitio en la playa son de 300 euros. Tampoco se puede en otros municipios malagueños como Algarrobo o Nerja.
También está prohibido en Cádiz, concretamente en Tarifa, y en Granada, en municipios muy turísticos como Almuñécar, Torrenueva de Costa y Motril. En la Comunidad Valenciana, no se puede en Benidorm, Gandía y Cullera. En estos municipios las multas por reservar sitio en la playa con la sombrilla oscilan entre los 750 y los 3.000 euros.
Prohibido orinar en el mar e ir con las mascotas
Puede parecer surrealista, pero lo cierto es que orinar en el mar también puede acarrear multas. En este sentido, Vigo ha sido la primera ciudad que ha anunciado las multas que recibirán aquellos bañistas que hagan sus necesidades en el agua. Estas ascenderán hasta los 750 euros. La ordenanza local considera que orinar en la playa es una falta leve. Por ello, ofrece alternativas como los servicios públicos instalados en las diferentes playas. Lo que se desconoce aún es cómo y quién identificará a los infractores.
En cuanto a las mascotas, a pesar de que muchos desean disfrutar de un día de playa con ellas, lo cierto es que existen zonas de costa específicas para ello. En las que está prohibido entrar con tu perro, existe una serie de carteles que informan sobre ello. En este caso, la multa por acudir con tu perro a una playa no habilitada para mascotas oscila entre los 100 y los 1.500 euros, variando en función de la normativa de cada municipio.
Bañarse con bandera roja, poner música alta o ducharse con jabón
Además de las anteriormente mencionadas, existen otras normas de obligado cumplimiento en las playas españolas. Un aspecto a importante a tener en cuenta es el color de la bandera de la playa a la que acudamos. En función de las corrientes de agua y la peligrosidad que conlleva el baño, estas pueden ser verdes, amarillas o rojas. El color rojo indica que está prohibido bañarse. Por ello, aquellos que se arriesguen a meterse en el agua cuando la bandera es de este color pueden ser sancionados con hasta 700 euros de multa.
Otra de las prohibiciones existentes en algunas playas españolas es la de poner música con altavoces. Se considera que las playas son espacios para disfrutar de la tranquilidad. Por ello, playas como la de Albufera, Laredo, Tarifa, Motril o Cartagena han prohibido el uso de altavoces. Tampoco está prohibido bañarse con jabón en los baños con los que cuentan algunas playas. Algunos municipios como Tarifa o San Sebastián han sido los primeros en implantar esta medida, cuya infracción conlleva multas económicas.
Las acampadas, prohibidas en todas las playas
Se trata de uno de los planes favoritos para muchos. Sin embargo, está completamente prohibido acampar en todas las playas de nuestro país. Los interesados en hacer este tipo de plan deberán acudir a una zona habilitada para ello. Las sanciones, en este caso, varían en función de las ordenanzas municipales. La región de Murcia, por ejemplo, es una de las más restrictivas. Acampar en playas como la de San Pedro del Pinatar podría conllevar una sanción de hasta 1.500 euros.