El mercado últimamente demanda coches baratos, que consuman y contaminen poco, y que sean capaces de recorrer grandes distancias. También que sean prácticos; es decir, que no abulten mucho para poder aparcarlos en el hueco más insospechado, pero que sean amplios y con un buen maletero. Buena prueba de ello son los coches más vendidos en lo que ha transcurrido de año en España, como el Dacia Sandero, el Nissan Qashqai o el Seat León. Sin embargo, al preguntarle sobre esta cuestión a los propios fabricantes, probablemente preferirían que sus súperventas fuesen otro tipo de vehículos, ya que con ellos acumularían mayores beneficios.
A modo de conclusión, estos no serían otros que los deportivos de lujo, los más vistosos y potentes, pero también los más caros. Esta conclusión es a la que ha llegado el portal de noticias Bloomberg, quien ha realizado un análisis para saber cuáles son los modelos que mayores ganancias aportan a sus respectivos logos.
Puede que no estuviese en las quinielas de muchos, pero el coche que mayores beneficios le ha dado a su fabricante es el Porsche 911. El icónico modelo de la marca alemana, en las carreteras desde el año 1963, supone el 29 % de las ganancias de Porsche, a pesar de que su volumen de ventas dista mucho de otros coches también presentes en este listado.
El 911, el más rentable
La octava generación del coupé deportivo ha generado 2.240 millones de euros a la compañía y, de cada uno de los 38.750 modelos vendidos en este curso (el 11 % del total de Porsche), el margen de beneficios fue del 47 %.
"Es un cálculo muy simple: el 911 es muy rentable en su propia forma, y cuando agrega las variaciones, los márgenes se vuelven inmensos", explica Michael Dean, analista de investigación de capital automotriz de Bloomberg. Este analista explica que el fabricante de coches de lujo recurre al mercado minorista para equipar a sus coches con algunos componentes, como los frenos o los turbos, pero que repercuten en el precio de venta.
El modelo de base de este 911 (el Carrera), sale a la venta desde 120.548 euros. Tiene 385 caballos y puede acelerar de 0 a 100 kilómetros por hora en 4,2 segundos. Por contraparte, la versión más lujosa del modelo, el Speedster, se vende desde los 308.743 euros. Es a esta diferencia a la que hacía referencia Dean, el analista del citado medio.
Con estas ganancias, la marca prevé compensar las pérdidas que estiman para su nuevo modelo eléctrico, el Taycan, el cual generará pérdidas (según sus cálculos) hasta el año 2023.
Más potencia, menos rentabilidad
El segundo vehículo de esta lista es, sin duda, el más rápido de entre todos, pero esta característica no le ha servido para coronarse como el más rentable. El Ferrari F8 Tributo garantiza a la compañía un margen de benefcios ligeramente superior al del Porsche, del 50 %, pero su número de matriculaciones (solamente 4.000) hacen que sea algo menos rentable en este ránking.
El coche del 'Cavallino Rampante' ha generado 307 millones este año para Ferrari, constituyendo el 17 % de las ganancias totales de la marca. El F8 Tributo es, como su propio nombre indica, un homenaje a toda la saga Ferrari de motores V8, uno de los eje centrales de la compañía. Es una berlina biplaza con un motor central trasero, capaz de desarrollar 720 caballos de potencia y de acelerar de 0 a 100 km/h en tan solo 2,9 segundos. precio base es de 269.000 euros.
Los SUV también presentes
Los tres últimos miembros de este selecto grupo son, como no podía ser de otra manera, coches del segmento SUV. Actualmente, este es el vehículo más demandado por los conductores, y las marcas son conscientes de ello.
La mitad de los vehículos que se venden a día de hoy son SUV, por lo que no es de extrañar que los fabricantes no hayan escatimado esfuerzos en exprimir al máximo sus respectivas cadenas de montaje para tratar de obtener beneficios.
Completan este listado el DBX de Aston Martin, el GLE de Mercedes y el BMW X5.
El DBX es el primer coches de estas características que desarrolla la marca de lujo anglosajona. Aunque no comenzará a venderse hasta finales de 2019 o principios del 2020, han conseguido que las reservas asciendan a las 4.500 unidades, de las cuales recaudarán el 40 % de su coste total, por el momento, desconocido.
Desde Aston Martin, se estima que las ganancias generadas por el DBX supongan el 17 % del total de la compañía.
El Mercedes GLE, por su parte, se lanzó al mercado a comienzos de año. Los precios que la firma alemana oferta (menores que en el resto de componentes del ránking) hace que, por cada unidad vendida, Mercedes solo saque de beneficio el 25 % del precio de venta del GLE, valorado en 67.000 euros.
Sin embargo, las más de 150.000 unidades vendidas han repercutido en Mercedes un beneficio de 1.565 millones de euros, suponiendo el 16 % de sus ganancias totales.
Por último, el BMW X5 presume de un margen de beneficio del 25 %. Se han vendido en el pasado año más de 175.000 unidades, generando para la marca 1.675 millones de euros. Gracias a estos datos, el X5 es el responsable del 16 % de las ganancias totales de BMW. Se vende desde 75.000 euros.