Highlands School El Encinar (Madrid)
Estructuran el aprendizaje con dinámicas de aula enfocadas a poder atender y dedicar el tiempo necesario a cada alumno de manera individualizada.
6 abril, 2022 20:04Tipo: Privado, mixto (Infantil y Bachillerato), diferenciado (Primaria y Secundaria), religioso y trilingüe.
Formación: Educación Infantil (1 y 2 años 100% en inglés y prevé abrir el curso de 4 meses para el próximo curso). Primaria, Secundaria y Bachillerato (con opción de Bachillerato DUAL).
Alumnos: 1300
Profesores: 152
El colegio Highlands El Encinar es un centro madrileño donde se ofrece una formación académica de excelencia, teniendo en cuenta que cada alumno tiene un ritmo diferente de aprendizaje y unas capacidades y talentos diversos. Estructuran el aprendizaje con dinámicas de aula enfocadas a poder atender y dedicar el tiempo necesario a cada alumno de manera individualizada, lo que llamamos
instrucción diferenciada.
Tienen tres pilares: enseñar, educar y evangelizar. En cuantro al primero, enseñar, estructuran el aprendizaje con dinámicas de aula enfocadas a poder atender y dedicar el tiempo necesario a cada alumno de manera individualizada, lo que llamamos instrucción diferenciada.
Sobre el segundo, educan dando una formación integral y armónica con disciplina positiva, donde los alumnos desarrollen los valores del humanismo cristiano por autoconvicción y donde se alcance la total autonomía que una persona adulta necesita.
Por último, el colegio ofrece una espiritualidad natural y alegre, enseñando a los alumnos a tener una coherencia de vida y dando especial importancia a los proyectos de acción social: "Buscamos que los alumnos tengan una experiencia de la fe tan positiva y que no puedan dejar de segur a Jesucristo después de conocerle", comentan.
Las diferentes estrategias que utiliza el profesor dentro del aula son: aprendizaje cooperativo, aprendizaje basado en problemas, proyectos de comprensión, rutinas del pensamiento experiencias de fe. Esta forma de aprender hace que los alumnos dejen de ser sujetos pasivos a pasen a ser protagonistas activos y entusiasmados de sus propios aprendizajes.
Trabajan diferentes habilidades de manera transversal durante toda la vida escolar de los alumnos. El alumno tiene la oportunidad de cultivar, a través de la vida cotidiana, las virtudes del humanismo cristiano.