Joaquín es un nombre masculino de origen hebreo, cuyo significado es 'Yahvé construirá'. Hoy, en España, 112.731 hombres celebran su santo gracias a San Joaquín, padre de María.
En el Evangelio de Santiago, Joaquín es descrito como un hombre rico y piadoso, que solía dar donativos a los pobres y a la sinagoga de Séforis. Según la tradición, él y Santa Ana vivieron primero en la región de Galilea y, posteriormente, se asentaron en Jerusalén, en la región de Judea.
No obstante, el sumo sacerdote rechazó a Joaquín y a su sacrificio animal en el templo porque su falta de hijos fue interpretada como un signo de desaprobación divina. Joaquín se fue al desierto y ayunó durante cuarenta días como penitencia. Unos ángeles se aparecieron tanto a Joaquín como a Ana para decirles que tendrían un hijo. Tras esto, Joaquín regresó a Jerusalén y abrazó a Ana en una puerta de la ciudad. Había una creencia antigua de un hijo nacería de una mujer mayor y que estaría destinado a hacer grandes cosas. En el Antiguo Testamento se cuenta una historia similar de otra mujer llamada Ana, que fue la madre del profeta Samuel.
La historia de Joaquín y Ana se encuentra también en la Leyenda dorada, hagiografía muy popular en la Edad Media, y ha sido muy representada en el arte cristiano, incluso cuando el Concilio de Trento limitó la representación de los evangelios apócrifos.
No se añadió ninguna celebración litúrgica de san Joaquín en el Calendario Tridentino. Fue añadida al Calendario romano general 1584 para su celebración el 20 de marzo, el día después de la festividad de san José. En 1738 se trasladó la festividad al domingo posterior al la Octava de la Asunción de María Para fomentar la liturgia de los domingos. El papa Pío X trasladó la festividad al 16 de agosto, el día después de la Asunción, por lo que Joaquín sería recordado junto con la celebración del triunfo de María. En el Calendario romano general de 1954 se consideraba festividad doble de segunda clase y en 1960 la consideró una festividad de segunda clase. En la revisión de 1969 del Calendario romano general se unió esta festividad con la de santa Ana, que tiene lugar el 26 de julio.
La Iglesia ortodoxa y la Iglesia ortodoxa griega conmemoran el 9 de septiembre la Sinaxis de Joaquín y Ana, el día después de la Natividad de Theotokos.
La devoción a San Joaquín es moderna, mientras que la de Santa Ana es más antigua, al menos data del siglo VI. También hay escritos de sor María de Jesús de Ágreda y la Beata Ana Catalina Emmerich (1774-1824) que hablan sobre Joaquín y Ana, aportando detalles que no están en los evangelios canónicos
Este y otros santos son celebrados durante el 26 de julio:
Santa Ana, madre María
San Austindo
San Erasto de Corinto
San Jorge Preca
San Simeón de Mantua
Santa Bartolomea Capitanio
Beata Camila Gentili
Beata María Margarita y compañeras
Beato Andrés de Phû Yên
Beato Guillermo Webster
Beato Hugo de Actis
Beato Jorge Swallowell
Beato Juan Ingram
Beato Tito Brandsma