Dos activistas de la organización ecologista Greenpeace han colocado este sábado unas gafas de buzo a la estatua de Colón, ubicada al final de la Rambla de Barcelona, para alertar de que el cambio climático en la Tierra está provocando un aumento del nivel del mar.
Además de esta acción, dos escaladores de la organización, que han tardado una hora en llegar hasta la cima del monumento, de 57 metros de altura, han desplegado una pancarta alusiva a la urgencia climática para denunciar que este problema apenas se ha tratado durante la campaña electoral. Greenpeace entiende que durante los últimos quince días, "no se ha tratado para nada el cambio climático ni otras cuestiones que importan a la gente en su día a día".
Sobre el hecho de que la estatua lleve ahora unas gafas de buzo y un tubo para respirar, la directora adjunta de Programas de Greenpeace, María José Caballero, ha dicho a Efe Televisión que tiene que ver "con que uno de los principales impactos de este cambio climático es el incremento del nivel del mar en todo el mundo".
Caballero, que ha remarcado que se trata de una acción pacífica, ha indicado que este sábado han querido en Barcelona "denunciar la indiferencia política ante la crisis climática durante la campaña electoral".
Las gafas de buceo que han colocado a la estatua "son el ejemplo de uno de los peores impactos que tendremos si no actuamos en contra del cambio climático, como es la subida del nivel del mar".
Sin embargo, ha advertido que "no será el único al que nos enfrentemos" y ha agregado, después de criticar que los partidos políticos "no han estado a la altura", que "expertos en cambio climático de Naciones Unidas nos avisan de que nos quedan poco más de diez años antes de que los peores impactos de cambio climático estén aquí".
Es por ello, que han querido aprovechar la jornada de reflexión para que "la sociedad piense, reflexione y actúe" y ha advertido de que: "estaremos aquí hasta que se nos escuche".
La organización ecologista comenzó una campaña de concienciación hace quince días con una factura gigante colgada en las torres de Colón de Madrid con el lema "Nos están costando la vida. Nos están costando el planeta. #NoPaguesLaCuenta".