Agentes de Policía localizaron este miércoles en Cala Major (Mallorca) el cuerpo sin vida de un hombre de nacionalidad española, Bernat Masquida Barceló (55 años) que, a juzgar por el estado del cadáver, llevaba mucho tiempo fallecido. De hecho, el forense que ha acudido a la vivienda donde fue hallado el cuerpo momificado ha determinado que, a priori, el hombre podía haber muerto hace unos cuatro o cinco años.
Según han informado fuentes de la Policía Nacional, los vecinos alertaron a la Policía Local hacia las 17.00 horas de este miércoles porque hacía tiempo que no veían al morador de la vivienda, según avanza el diario balerar Última Hora.
Fue cuando los agentes se personaron en el domicilio situado en la calle Miquel Roselló Alemany y pudieron acceder al domicilio, donde encontraron el esqueleto momificado de un hombre encima de un sofá cubierto con una sábana o manta, informa el citado medio mallorquín. Se dio aviso a la Policía Nacional y al forense.
El forense, a priori, estima que pudo morir hace unos cinco años. Sin embargo, ha dicho que no se puede determinar con prescición hasta que no se la practiquen las pertinentes pruebas en el Instituto de Medicina Legal de Palma.
Por otra parte, los vecinos están consterandos. "Es muy triste que nadie notara a faltar a Bernat Mesquida durante más de cinco años", decían al medio Última Hora que también desvela que, según los agentes, el hombre de 55 años fallecido también podía padecer síndrome de Diógenes.