Jácome asegura que empujó a la sindicalista para protegerse de "una agresión acústica"

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El alcalde de Ourense, Gonzalo Pérez Jácome, ha asegurado que el empujón que propinó esta mañana a las puertas del Concello a una sindicalista durante la primera jornada de huelga del transporte urbano lo realizó "en defensa propia" ante una amenaza de "agresión acústica" que le podía haber "roto el tímpano" y que reaccionó "de forma instintiva" para protegerse.

En un vídeo compartido en sus redes sociales, Jácome ha explicado que salió por la puerta principal del Consistorio para tratar de hablar con el representante sindical, y que la sindicalista de CC.OO. le abordó para que dijese unas palabras por el megáfono. Ante su negativa, le acercó el megáfono "a la cabeza" y empezó "a vociferar".

"En ese momento veo que se va a producir una agresión acústica porque obviamente me puede romper el tímpano, y en ese momento reacciono de forma instintiva, si a lo mejor tengo uno o dos segundos más para pensar a lo mejor hago otra cosa, pero veo que hay una amenaza de una agresión acústica que me puede romper el tímpano, dejar sordo y tener una pérdida auditiva permanente, pues la aparto y le doy un empujón", ha apuntado el regidor ourensano.

Jácome asegura en el vídeo que no tiene que pedir perdón a la sindicalista agredida, y sí, "a lo mejor", a "la ciudadanía por estas situaciones". "No se puede meterle un megáfono al oído a una persona porque le puede romper el tímpano", y añade: "conozco a gente que ha sufrido agresiones de piquetes de huelga y se ha quedado sorda".

Según sus palabras, finalmente subió al salón de plenos a unos 10 representantes porque está "intentando mediar para resolver este conflicto". Un episodio del que asegura que son "contingencias como alcalde".