Galicia registró un mes de julio seco y con temperaturas normales para este período, según el avance del último informe climatológico mensual elaborado por Meteogalicia. Este período se caracterizó por la presencia de una zona de aire frío en capas medias y altas de la atmósfera en el Atlántico norte, que impidió que el anticiclón se moviera hacia el norte, dejando a Galicia en zonas intermedias, con más predominio anticiclónico, pero con acercamientos frecuentes de frentes atlánticas endebles y sin aproximaciones de masas de aire norteafricanas.
Así, la anomalía media de la temperatura para este mes, obtenida a partir de los datos registrados en 11 estaciones meteorológicas representativas, fue de 0,2 grados, lo que hace que julio pueda considerarse como normal en el conjunto de la Comunidad.
Más al por menor, el valor medio de las temperaturas máximas fue de 24,4 grados, registrándose los valores más altos en las riberas del Sil, en el Miño ourensano y en la comarca de Verín, donde se llegaron a conseguir los 31,6 grados. Por el contrario, los valores más bajos se dieron en los puntos más elevados de la sierra de Queixa y Serra do Eixe, en las que rondaron los 16 grados. En el caso de las temperaturas mínimas, el promedio fue de 12,7 grados. Los valores más bajos se registraron en las sierras de Larouco, Queixa y de O Eixe -6,7 grados- y los más altos en varios puntos del litoral, con hasta 17,6 grados.
En lo que se refiere a las precipitaciones, la anomalía media, obtenida en base a los registros de 16 estaciones meteorológicas significativas, fue un 43% inferior al valor climático normal, por lo que este mes se puede considerar seco.
De este modo, la precipitación media acumulada fue de 23 l/m2, registrándose los valores más elevados en áreas del oeste de la provincia de A Coruña con hasta 145 l/m2, seguidas de áreas del sudoeste de esta provincia y del noroeste de Pontevedra, con cerca de 100 l/m2. Por el contrario, en puntos de las comarcas ourensanas de Verín y Viana localmente hubo entre 0 y 1 l/m2.