El rey emérito continúa disfrutando de su estancia en Sanxenxo (Pontevedra). Tras no encontrarse finalmente con su hijo, Felipe VI, el pasado jueves (los dos estaban en Galicia, separados por solo 15 kilómetros), esta jornada de sábado se ha sumado a él otra miembro de la Familia Real, la infanta Elena. Como es habitual, participa en las regatas que se celebran estos días en la localidad y por las que Juan Carlos I se ha desplazado de nuevo a España.
Según relata Europa Press, en esta segunda jornada de regatas Juan el exmonarca no navega a bordo del velero ‘El Bribón‘, sino en la lancha semirrígida ‘Cristina’. La infanta Elena participa en una embarcación diferente. La competición se vio alterada por la falta de viento y empezó más tarde de lo programado.
La regata de clase 6 metros, en la que compite el emérito, no arrancó como era previsto a las 13:00 horas, por lo que Juan Carlos I se personó más tarde en el Náutico de Sanxenxo, en torno a las 14:00 horas. Accedió en el coche de su amigo Pedro Campos directamente hasta el espigón y una vez en el puerto, vestido con ropa náutica, bajó las escaleras del pantalán agarrado de la barandilla y con la ayuda de su asistente.
Durante este momento previo a embarcar, Elena y Juan Carlos I no se acercaron. Además, el exmonarca se detuvo en el pantalón a sacarse una foto con un niño antes de subirse a la lancha, patroneada por Pedro Campos. Habrá que ver si este sábado trae mejor suerte para su embarcación, que ayer quedó de penúltima.