La Policía Nacional ha intervenido un total de 11 toneladas de cocaína en contenedores marítimos que iban a ser distribuidas en Europa en una operación en la que se ha detenido a 20 personas que integraban dos organizaciones criminales de origen balcánico.

La operación se ha llevado a cabo en dos puertos: Vigo y Valencia. En el caso de Galicia, se han intervenido 7.500 kilos de cocaína en una nave de Cambre (A Coruña), la mayor aprehensión realizada en Galicia; la sustancia estupefaciente venía oculta en lomos de atún congelado donde fue localizada el pasado día 5 de diciembre.

Operación Tonara, en Galicia

Bajo el nombre de Operación Tonara, se identificó una empresa de A Coruña que se dedicaba a la importación de la sustancia que recibía desde Sudamérica y que se dedicaba al comercio internacional al por mayor de pescado y marisco congelado y a la compra venta de fincas rústicas y urbanas y edificaciones y construcciones en general.

A través de un voluminoso flujo de contenedores, el empresario responsable, de origen coruñés y bajo vigilancia desde 2019, trataba de encubrir el envío de la cocaína utilizando empresas de origen y siempre con destino a la Península Ibérica. En la investigación, se detectaron varios envíos similares que tenían el objetivo de encubrir, a través de una pretendida actividad lícita, el transporte de la droga. Desde la Policía Nacional destacan que ya habían sido inspeccionados varios contenedores de la empresa durante 2023.

Según se ha podido comprobar, la organización trasladaba los contendores al Puerto de Algeciras y posteriormente los enviaba hasta el puerto de Vigo, donde se detectaron dos de ellos; la droga se encontraba íntegramente en el interior de uno de los contenedores, momento en el que se llevó a cabo la detención de todo el personal que se encontraba en la nave donde se estaba llevando a cabo la descarga de la cocaína.

En este operativo se intervinieron 7.500 kilos de cocaína ocultos en un cargamento de lomos de atún congelado y el estupefaciente se encontraba marcado con cuatro logotipos diferentes que identificaban a las organizaciones criminales europeas que deberían recibir el alijo.

Operación Fulgor, en Valencia

En el caso de Valencia, han sido intervenidos 3.400 kilos de la misma sustancia que venía oculta en el doble fondo de dos contenedores que formaban parte de un lote de cuatro que llegaron al puerto valenciano a principios de noviembre.

Los contenedores no se movieron durante casi 30 días; una estrategia de la organización criminal, señalan desde la Policía Nacional, para que pareciese que estaban abandonados, hasta que a finales de mes, de manera repentina, cambiaron la empresa destinataria de la mercancía.

Los cuatro contenedores fueron trasladados hasta un polígono de la localidad valenciana de Xirivella. Fue en la nave donde permanecieron alojados donde se llevó a cabo el operativo con la presencia del Grupo de Operaciones Especiales (GOES). De uno de los contenedores ya se había vaciado la mercancía, mientras que otro de ellos se encontró en el doble fondo. Los dos restantes no contenían cocaína.

Según ha informado la Policía Nacional, las dos organizaciones contaban con un entramado empresarial para el envío de cocaína desde Latinoamérica hacia varios puertos de la Península Ibérica y, desde aquí, se distribuía por Europa. En las investigaciones también participaron la Agencia Tributaria y otros organismos internacionales.