La llegada del humo a Galicia procedente de los incendios activos en el norte de Portugal puede tener consecuencias negativas para la salud. Por ello, la Consellería de Sanidade, a través de la Dirección Xeral de Saúde Pública, ha comunicado una serie de recomendaciones para los ciudadanos.

Para evitar los efectos adversos, desde la Xunta recomiendan no practicar actividades al aire libre, sobre todo ejercicios intensos, cerrar ventanas y puertas para evitar la entrada de polvo en los domicilios, mantenerse en ambientes húmedos e hidratarse. 

Estas recomendaciones van dirigidas, especialmente, a la población que puede ser más sensible, como aquellas personas con enfermedades cardiocirculatorias o pulmonares, principalmente asma o EPOC, los ancianos, niños y embarazadas.

Además, destacan que la peligrosidad del polvo para la salud depende del tamaño de las partículas. Las PM10, 10 micras, pueden provocar síntomas como iirritación en los ojos, nariz, boca y garganta.

Las de 2,5 micras, PM2,5, tienen además el peligro de introducirse en los pulmones y en el torrente sanguíneo y provocar una disminución de la capacidad respiratoria, molestias torácicas, tos, palpitaciones, fatiga o el incremento a la susceptibilidad a las infecciones respiratorias durrante, por lo menos, los cinco días posteriores al comienzo del episodio.

Según el mapa de la calidad del aire de MeteoGalicia, ahora mismo son 5 las estaciones gallegas con peor calidad del aire. Las cuatro que se encuentran en Vigo y la situada en el municipio coruñés de Cee, en la Avenida Fernando Blanco, que señala que la calidad del aire en el lugar es "mala".

En caso de empeorar los síntomas respiratorios, desde la Consellería de Sanidade recomiendan consultar con profesionales sanitarios o llamar al 061.