Cambados y Vilanova ya se sitúan por encima de los 250 casos por cada 100.000 habitantes de incidencia en 14 días según los datos oficiales del Sergas. A Illa de Arousa supera ya los 500 casos en los últimos 14 días, lo que obligaría a Sanidade a decretar el nivel máximo en la reunión de esta tarde.
El área sanitaria de Pontevedra-O Salnés notificaba esta mañana 43 nuevos positivos, que sumados al escaso número de altas hacen que los casos activos se sitúen en 546. Además, la presión hospitalaria continúa aumentando y ya hay 6 camas UCI ocupadas en el Hospital de Montecelo, lo que hace que el Comité Clínico se plantee aumentar las restricciones para varias localidades.
La consellería no ha confirmado a qué puede deberse este aumento de casos, en unas semanas marcadas por el macrobrote de Baleares y la proliferación de aglomeraciones tras la desescalada en Galicia. Estos cambios se sumarían a las restricciones decretadas en Barro, Cambados, Pontevedra y Vilaboa, que detectaron un importante aumento de casos debido precisamente al brote de Baleares, y que están en nivel medio desde el pasado sábado. También Poio se encuentra en este nivel, afectado por el mismo brote.
Cribados masivos
Se seguirán haciendo cribados en busca de posibles asintomáticos para frenar el avance desmedido de positivos en el área sanitaria. Así, el Sergas ha convocado a 2.000 personas de entre 20 y 29 años para hacer test PCR en las localidades de Vilagarcía de Arousa, así como a casi 3.500 personas de 20 a 39 años en a Illa de Arousa y Cambados. Con estos cribados masivos se pretende hacer frente al elevado número de contagios registrados en los últimos días: las tres localidades suman una treintena de nuevos casos en solo una semana.
En cuanto a la participación en los cribados, no está siendo tan preocupante como en la vecina área viguesa, pues durante la pasada semana se saldaron en todos los casos con más de un 50% de participación, llegando a rozar el 70% en algunos centros educativos, en el foco de Sanidade tras el brote de Mallorca. No ocurrió lo mismo con el cribado poblacional para los jóvenes de Vilaboa, al que solo acudieron un 22,15% de los citados.