La Guardia Civil de Pontevedra ha logrado recuperar en Baiona una embarcación tipo catamarán de bandera sueca, valorado en 450.000 euros, que había sido robada del puerto de Portimao, en Portugal, en el mes de mayo. La investigación arrancó el pasado mes de julio tras un aviso de la policía alemana solicitando colaboración policial urgente para incautar, asegurar e inspeccionar dicho barco.
Así, los agentes del Grupo de Patrimonio de la Unidad Orgánica de Policía Judicial pusieron en marcha las pesquisas y localizaron en el puerto de Baiona un navío con las mismas características que el robado en Portugal. El propietario era un ciudadano sueco residente en Luxemburgo que alegaba haber comprado legalmente el barco.
Con todo, los agentes incautaron el catamarán para inspeccionarlo y comprobaron que se trataba de un barco de nombre distinto al original y con bandera polaca en vez de sueca. Además, los números identificativos de fabricación troquelados en popa se encontraban manipulados y la numeración de motores no se correspondía con la documentación de compra del barco.
Recuperación del barco e investigados
La Guardia Civil procedió a ponerse en contacto con el astillero donde se fabricó la nave, localizado en Francia, y conseguir así la información sobre cuál era el sitio secreto del número único identificativo del casco de la nave. Con este dato se pudo volver a inspeccionar el barco y determinar que, efectivamente, era el que había sido sustraído en Portugal.
A través del Centro de Cooperación Policial y Aduanero de Tui-Pontevedra (CCPA) se informó a las autoridades policiales portuguesas de la recuperación del barco, ya que el procedimiento se tramita en el Tribunal penal territorial de Portimao, así como la intención de entregarlo a su legítimo propietario.
El dueño del catamarán se desplazó a principios de este mes desde Luxemburgo hasta Baiona para hacerse cargo de él. Un día después de entregar el barco, la Guardia Civil pudo saber que la persona que inicialmente había traído el catamarán al puerto de Baiona había intentado sobornar al personal del puerto deportivo, ofreciéndole cierta cantidad de dinero para hacerse con copia de la documentación del propietario del barco y de esta forma amparar la venta legal del barco.
Finalmente, las pesquisas han llevado a investigar a un vecino de Gondomar de 28 años como presunto responsable de transportar el barco hasta Baiona; concretamente, se le acusa de ser autor de los delitos de receptación, falsedad documental y corrupción en los negocios.
Además, la Guardia Civil ha solicitado una OEI (Orden Europea de Investigación) dirigida a las autoridades policiales italianas para investigar a otro ciudadano italiano que participó en la venta del catamarán. Las diligencias fueron entregadas en el Juzgado instrucción número siete de Vigo.