Daniel Calparsoro dirige esta historia, en la que la realidad supera (con creces) a la ficción y los cuentos de cárteles internacionales y huidas inimaginables acaban en el fondo de las rías gallegas junto a tres toneladas de cocaína. La grabación de la miniserie, producida por Ficción Producciones para Amazon Prime Video, es un impresionante rompecabezas en el que el primer semisumergible cargado de droga que llegaba a Europa era el gran protagonista.
"Lo primero que hicimos fue plantearnos cómo dar vida a ese submarino, que sería el centro de nuestra historia, y que tenía que ser lo más real posible", cuenta Mamen Casal, coordinadora de producción y responsable de ventas internacional de Ficción Producciones. La idea, además, era rodar íntegramente en las rías gallegas, aunque parte de la producción se hizo en Portugal, "pero el 80% de la grabación fue en Galicia, principalmente en exteriores".
Una gran piscina con un simulador de movimiento se convirtió en el plató en el que Álex González, David Trejos y Leandro Firmino darían vida a la historia de Nando, un joven gallego que se ve obligado a participar en el transporte de la droga tras atravesar graves problemas económicos, y los dos tripulantes que lo acompañarían en un submarino desde Brasil hasta Galicia. "Los guiones están inspirados en la historia real, pero hay parte de ficción porque la investigación sigue en curso y hay muchas cosas que todavía no se saben sobre el caso", asegura Casal.
Cuando la realidad supera a la ficción
"Escuchamos la historia y nos vimos en la necesidad de contarla", reconoce Mamen Casal. Su primer paso fue contactar con la Guardia Civil, que llevaba la investigación y configuró la operación que acabaría atrapando a los tres tripulantes del narcosubmarino. "Nos encontramos con que ellos no podían darnos cierta información porque era una investigación en curso, así que nos aconsejaron hablar con los periodistas que siguieron el caso".
Así llegaron hasta Javier Romero, periodista de La Voz de Galicia, que acaba de editar un libro sobre el seguimiento que hizo de la Operación Marea Negra. "Igualmente, sigue habiendo cosas que no se saben, como dónde está el dinero o quién está detrás de la operación, aunque si supiésemos esta información quizás tampoco podríamos contarla porque sería peligroso", reconoce.
Una vez escrita la historia, los guiones pasaron por la Guardia Civil "tanto para ser fidedignos como para que la investigación que llevó al proceso de captura fuese veraz". Así han construido una serie que, aunque tenga su parte de ficción, cuenta todo lo que se sabe sobre el narcosubmarino a día de hoy.
"También nos vimos en la necesidad de hacer un documental sobre el tema, para contar, esta vez sí, la historia de verdad". Operación Marea Negra: La travesía suicida habla desde el punto de vista de abogados, guardias civiles, policías, periodistas y otros implicados en la operación.
Rodar en mar abierto
"En Galicia contamos con la ventaja de que el mar abierto está muy cerca de las bocas de las rías, pero grabar en el agua siempre es peligroso y fue la parte más compleja del rodaje", dice la coordinadora de producción. A esto se sumó que uno de los protagonistas, Leandro Firmino, no sabía nadar cuando llegó a España. "Álex y David también lo pasaban mal, al final tenían que pasar todo el día en el agua y ya sabemos que el Atlántico en Galicia no está precisamente caliente. Pero a Leandro había que sumarle un componente psicológico, se le dieron clases de natación y se encontraba más seguro, pero grabar en el mar da mucho respeto y para él fue duro".
Casal reconoce que el rodaje fue complicado para todo el equipo, tanto por la enorme implicación que se necesitaba para seguir los protocolos de seguridad al pie de la letra, como por las condiciones a las que estaban sometidos todos los miembros del equipo. "Necesitamos el apoyo de la Guardia Civil y Protección Civil en todo momento, tanto dentro como fuera de las rías, además de que teníamos protocolos de seguridad muy estrictos para que todo saliese bien".
Durante tres jornadas completas, incluyendo escenas grabadas de noche, los actores estuvieron metidos bajo el agua en la zona de Aguiño, mientras todo el equipo se esforzaba por agilizar el proceso. "Contábamos con dos motos de agua que se iban corriendo a puerto a volcar el material para no quedarnos sin tarjetas de memoria, fue una grabación muy compleja".
Otra de las grandes dificultades, por supuesto, era la de representar un semisumergible fiel a la realidad "y meterlo en el agua para grabar". Así, se construyeron tres batiscafos que se utilizarían durante todo el rodaje para emular la embarcación en la que los tres tripulantes llegaron a Galicia. "Teníamos tres semisumergibles: una carcasa para grabar recursos en mar abierto, una réplica para la piscina de plató y otro construido por partes para poder rodar cómodamente las escenas de su interior", explica la coordinadora de producción.
Una misión suicida
Mamen Casal cuenta cómo fue rodar las complejas escenas en alta mar, "cuando los tripulantes empezaron a tener problemas y llegó la desesperación", pero también relata lo difícil que es a nivel de producción montar una operación policial en la que se atrape a tres narcotraficantes. "Contamos con la ayuda de la Guardia Civil en todo momento y sin ellos no habría sido posible grabar una captura tan real".
De hecho, el culmen de la Operación Marea Negra llega con la aparición del narcosubmarino en la ría de Aldán y la detención de dos de sus tripulantes mientras el joven gallego huía a un monte cercano. "Para esto la Guardia Civil nos ayudó con un helicóptero, tres embarcaciones, seis coches y treinta agentes: sin ese apoyo no habríamos podido costear una escena tan icónica y tan real como la que se ha hecho".
La clave para conseguir que la serie sea fiel a la historia y que el rodaje saliese perfecto, reconoce Casal, "es haber contado con un excelente equipo técnico y con estos directores, que han sacado lo máximo de cada localización". También los actores, "a los que costó mucho elegir", han sido la elección idónea para que la Operación Marea Negra llegue a las pantallas de una forma tan espectacular como lo hará el próximo febrero.
Ahora solo queda esperar al estreno, del que todavía no pueden contar mucho, y cruzar los dedos para que la historia más surrealista que han conocido los gallegos en los últimos años no se quede solo en una miniserie. Al fin y al cabo, el juicio comenzó el pasado diciembre: ¿podría ser esta primera temporada solo el comienzo?