Abel Caballero volvió a pisar el plató de El Hormiguero, el programa de prime time de Antena 3 presentado por Pablo Motos, por segunda vez, después de su primera aparición hace poco más de dos meses. En este caso, lo hizo acompañado de Miguel Ángel Revilla, presidente de Cantabria, para competir entre ambos por ser el más popular.
Lo que partió de una propuesta de Pablo Motos, ayer se hizo realidad y ambos acudieron al programa, en el que con sentido del humor se retaron en varias ocasiones, comparando sus alcances mediáticos. En cuanto a la asistencia al programa de Motos, Revilla golea a Caballero, con 26 presencias por las 2 del alcalde de Vigo. "El termómetro es El Hormiguero", aseguró el presidente de Cantabria.
Caballero aseguró que su presencia mediática tenía un objetivo: "Era poner a Vigo en el mapa, que no somos capital de provincia. Y a mí me parecía que nosotros teníamos que conseguir que una ciudad tan extraordinaria como Vigo ocupara el sitio que le corresponde y a través de trabajo y presencia, Vigo ocupa su lugar".
En las redes, en las encuestas realizadas en la cuenta oficial de El Hormiguero, el ganador fue Revilla.
No faltaron, tampoco, las comparaciones entre Vigo y Cantabria; por ejemplo, dónde llueve más. La conversación también giró en torno al término "populista" y "populismo", donde ambos estuvieron de acuerdo en señalar en que sus acciones no son forzadas y que esos calificativos suelen venir de "los que pierden". Motos también dio a conocer los apodos que, según él, reciben ambos mandatarios: el ‘Anchoas’ y el ‘Bombillas’.
Además de su presencia en el plató, El Hormiguero enseñó cómo es un día en la vida de Abel Caballero: desde que sale de su casa hacia el Ayuntamiento, un paseo por la calle, las peticiones de los vecinos, el desmontaje de las luces de Navidad y la aparición estelar de Tony Lomba cantándole al alcalde.