Proyecto Ewa, pilar del arte urbano en Vigo
La asociación viguesa promueve el arte en el espacio público desde el año 2013
26 octubre, 2020 06:00Largas cuestas adornadas por edificios grises, playas inexistentes eclipsadas por extensos puertos, grandes fachadas monocromáticas. ¿Es Vigo una ciudad fea? Probablemente sus detractores dirán que sí pero hay un pequeño conjunto de personas decididas a cambiar la realidad de la ciudad olívica.
Proyecto Ewa nace en 2013 cuando un grupo de amigos, artistas multidisciplinares de Vigo, se une con un propósito creativo: "ser un vehículo de interés para la ciudadanía, soporte de expresión y sustento para los artistas" en palabras de Patricia Sánchez, miembro de la organización.
Su lucha, como ellos la llaman, persigue buscar otro tipo de ciudad, una ciudad poética llena de color. A día de hoy se han convertido en uno de los principales soportes del arte urbano de la ciudad. El uso de la palabra es su sello de identidad y su acto reivindicativo.
En ocasiones, se confunde el concepto de arte urbano o arte callejero, pasándolo por algo nocivo o a evitar, Proyecto Ewa busca eliminar este falso estereotipo y llevar el arte a las calles. Este colectivo se define como "una organización que impulsa proyectos innovadores y transformadores de arte en el espacio público". Y así lo demuestran formando parte de iniciativas como el conocido festival de arte urbano Vigo, ciudad de color, del que fueron promotores. Hoy, son parte de la comisión de arte urbano que valora las obras y los artistas que participan en cada edición.
A través de las Jornadas de Arte Urbana, de las que son organizadores por tercer año consecutivo, fomentan el arte además de acercar a la ciudadanía no especializada a invitados expertos, artistas y gestores de arte urbano, no solo de la ciudad sino también de Europa. Además, desde hace dos años elaboran "la batalla mural", mediante la cual nuevos creadores pueden acceder al programa municipal Vigo, ciudad de color. El ganador recibe como premio poder participar en la iniciativa al año siguiente de manera remunerada, acercando así posibilidades profesionales a artistas menos consolidados.
Los miembros de Proyecto Ewa son positivos con la visión que tiene la ciudadanía respecto a su trabajo, y sostienen que cada vez es más consciente de su importancia. "Muchas veces es una manifestación espontánea del pulso creativo de una ciudad, muchas otras veces es la manifestación de un malestar o una preocupación. Si uno da un paseo por las calles de Vigo, verá auténticas joyas pictóricas en muchos de sus muros", afirma Patricia Sánchez. Grandes ciudades europeas destacan por sus obras callejeras, haciéndolas emblema, como es el caso de Berlín o Londres. Vigo podría llegar a ser un exponente de arte urbano europeo.
Vigo creció rápidamente en los años 60-70 dejando atrás joyas arquitectónicas que embellecían la ciudad, las cuales serían sustituidas por anodinos edificios grises. El lado positivo que ven los miembros de Proyecto Ewa a lo que otros consideran una catástrofe es que ahora Vigo es "un lienzo en blanco donde plasmar el arte". Son conscientes de la problemática y sobre ella construyen los cimientos de su lucha.
Lo que es indudable es que este grupo de artistas han conseguido que muchos vigueses aprecien determinados espacios de su ciudad, inundando las redes de actos sencillos que colaboran con su proyección, mediante selfies e instantáneas con sus obras.
Un camino hacia la profesionalización del arte urbano
Para ellos, el 2021 es un recorrido que avanza sobre el asentamiento de la profesionalización sobre el concepto de su organización. Objetivo que tienen más que conseguido. El Covid no ha podido con ellos, siguen las medidas, mascarillas y protocolos, pero nada puede parar el recorrido del arte. Como dice Patricia Sánchez, de la inquietud de una pandilla de amigos han evolucionado a un grupo de personas tremendamente comprometidos con un proyecto social y con un alto nivel de exigencia en lo que hacen. Cada vez más empresas privadas confían en ellos para la realización de intervenciones en sus instalaciones y fachadas.
Su actividad cultural es frenética. Además de las iniciativas ya mencionadas acercan el arte a los más pequeños con actividades como el taller Animaliza tu chupa con el artista Federico Fernández, han colaborado desde hace años interviniendo los espacios grises del municipio de Oia y han coorganizado una actividad solidaria denominada “Lamp-Art” en la cual más de 20 artistas decoraban artísticamente lámparas obsoletas, dándoles una segunda vida.
Adelantan que están inmersos en un proyecto propio, sin ningún tipo de patrocinador, en el que combinarán los dos pilares de Proyecto Ewa: el visual y la poesía.
Se han convertido en una organización artística completamente asentada en la ciudad de Vigo y sus alrededores. Su labor social es indudable y el embellecimiento sistemático que crean con su arte y sus iniciativas supone cada día un paso más hacia el objetivo de conseguir el Vigo del futuro. Las palabras de Patricia son claras, "El sector cultural es frágil y sin embargo fundamental para una sociedad sana y crítica. Los artistas deben seguir interviniendo el espacio público de forma segura y remunerada, claro. En estos tiempos de retraimiento, estamos más necesitados que nunca del arte, una dimensión que profundiza en la esencia humana y estrecha vínculos entre nosotros.".
Movimientos como Proyecto Ewa ayudan a comprender y valorar el arte. De cara al próximo año se estiman entre 12 y 14 murales más para la ciudad con el proyecto Vigo, ciudad de color, de los ya 133 que se han promovido desde el programa.
Pero no todo parte de las instituciones. Grandes y desconocidos artistas se abren paso desde las más recónditas esquinas de nuestra ciudad. Los miembros de Proyecto Ewa animan a los vecinos y visitantes a buscar la multitud de expresiones artísticas que pueblan Vigo. Está en manos de todos darles voz. Ellos ya han hecho su parte, ahora es el turno de la ciudadanía.